Por fin llegaron los goles para el Ciclón y de esa forma consiguió una victoria reanimadora que le permite encenderse en el torneo y escalar algunos lugares en la tabla clasificatoria y acumulativa.
Josué Colmán, en dos ocasiones, Marcos Riveros y Cecilio Domínguez fueron los responsables de liquidar el expediente ayer en Sajonia, ante un desdibujado cuadro ñuense que jugó con diez casi toda la complementaria y se mostró muy por debajo del nivel de fechas anteriores.
La contundencia que estuvo ausente en juegos pasados en esta ocasión apareció y fue determinante para cerrar el partido. Además de los goles el conjunto azulgrana mostró una buena dinámica de juego y exhibió su mejor juego colectivo en lo que va del torneo. Ganar era relevante para arrojar un poco de paz en barrio Obrero, a pocos días del desquite ante Fénix, el miércoles por la Copa Sudamericana.
Compacto. Gustavo Florentín va imprimiendo un estilo de juego a su equipo con el transcurrir de las fechas. El DT no guarda muchos secretos, no se complica demasiado tampoco para conformar su equipo con jugadores en su puesto. No hay improvisaciones y Cerro gana volumen de juego. Ahora tendrá una prueba importante, por la Copa, donde no sirve otro resultado que ganar y no recibir goles.
En cuanto a Rubio Ñu, Mario Jara fue contundente al término del partido y aseguró que en su equipo “no hay compromiso”.