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Rubio Ñu tuvo un planteamiento inteligente y se llevó los tres puntos de Tuyucuá.
El que llegó al partido con el estímulo de ganar el compromiso fue Libertad, pues si sumaba los tres puntos se instalaba juntamente con Sol de América en la cúspide a la tabla de posiciones.
Sin embargo, el conjunto ñuense llegó con el objetivo de cerrar todas las salidas del adversario y apostar a los rápidos contragolpes.
El Gumarelo creó buenas opciones en la primera parte. Rubio Ñu no quedó atrás y también generó muy buenas jugadas de medio para adelante y donde lo tuvo a un Roberto Toro Acuña como conductor central. El volante mostró a todos cómo se debe jugar a un toque y hacerlo de buena manera, porque todos los balones que tocó los entregó muy bien. No jugó con la cédula y por su trayectoria, sino por la jerarquía que siempre lo caracterizó y que la mantiene intacta. Gustavo Velázquez anotó el único tanto del partido.
Rubio Ñu aguantó bien la presión de Libertad en la etapa complementaria. El Albinegro creó varias ocasiones, pero se encontró con una defensa que nunca se cansó de sacar los balones, ya sean los que venían por arriba o por abajo.
La virtud de Rubio Ñu radicó en el orden.