19 mar. 2024

Froilán: “Mi salida de la UNA obedece exclusivamente a un golpe político”

Pepe Vargas

Su versión.  Froilán,  jubilado de la docencia, se dedica a atender a perros y gatos en su clínica.

Su versión. Froilán, jubilado de la docencia, se dedica a atender a perros y gatos en su clínica.

Lo niega todo. Froilán Peralta, ex rector de la Universidad Nacional de Asunción (UNA), se defendió de cada una de las acusaciones en su contra en una extensa entrevista a este diario, disponible en la página web de ULTIMAHORA.COM.

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No solo reasegura que todos los nombramientos que realizó los hizo conforme a resoluciones y reglamentos de la UNA, sino que las irregularidades que se le atribuyen conforman la “regla de juego” en la UNA que hasta hoy sigue vigente en la figura del Estatuto.

“Soy el único en la historia de este país que, según la Fiscalía y la prensa, por haber utilizado cargos docentes para función administrativa, haya ido a la cárcel”, proclamó Froilán, quien desde hace un año se dedica exclusivamente a la “atención de perros y gatos” en sus dos clínicas veterinarias que habilitó en San Lorenzo.

Cuando se vio forzado a renunciar –expuso–, la universidad tenía casi 9.600 cargos docentes, en tanto que menos de 3.000 profesores eran escalafonados; o sea, que accedieron al cargo por concurso de méritos y aptitudes.

“Es decir, un poco más de 6.000 cargos docentes son ocupados sin concursos y eso sigue igual, porque en dos años no se pudo haber llenado 6.000 cargos ni se habrán hecho 6.000 concursos”, contrapuso.

Es así que, sin vueltas, ataca directamente a la raíz de su salida furtiva de la UNA, yendo a parar, incluso, por un par de meses al penal de Tacumbú.

“Mi salida de la UNA obedece exclusivamente a un golpe político; no obedece a una acusación que me pudieran hacer de haber deshonrado a mi familia, de haber robado dinero en efectivo de la UNA ni haber pasado de un proceso de licitaciones amañadas, de construcciones no hechas ni de compras inventadas. A mí me acusan de haberle obligado a alguien, o a unos pocos, de 15.000 funcionarios que tiene la UNA, a cobrar indebidamente y eso es un invento. Todos aquellos nombramientos están respaldados por reglamentos, resoluciones y el artículo 48 del Estatuto de la Universidad Nacional. Siguen haciendo lo mismo (las actuales autoridades), porque no pueden hacer otra cosa, yo no estoy acusando de que siguen haciendo mal”, argumentó.

En su defensa, articuló que de la lista de 47 imputados que arrojó la investigación fiscal por el presunto hecho de cobro indebido de honorarios, 21 personas fueron comisionadas de la Facultad de Ciencias Veterinarias a la Municipalidad de Lambaré. “Ninguna de estas resoluciones tiene mi firma; las 21 personas comisionadas no tienen mi firma”, insistió.

Froilán se quejó de que a ninguno de esos funcionarios, quienes devolvieron el dinero “por una cuestión” para la suspensión condicional del procedimiento ante el fiscal del caso, se les permitió siquiera la posibilidad de defenderse para explicar por qué cobraban esos rubros. “Directamente fueron imputados y sacados de la Facultad de Veterinaria. No se les dio oportunidad de demostrar nada y se les obligó a devolver el dinero, y ellos habían trabajado, porque no puede ni la Fiscalía decir lo contrario, porque no se les hizo un sumario administrativo como el Estatuto de la UNA exige”, lanzó.

¿DE SU PARTIDO? A la pregunta de la procedencia del golpe que afirma haber sufrido, reveló: “De mi propio partido en principio, para cambio de hombres y mujeres, pero fueron tomados por otros movimientos y ya no se pudo controlar. Al final no pudieron poner a las personas que pensaban poner en vez de Froilán”, tiró y retrocedió hacia el punto de quiebre con el primer anillo de Horacio Cartes: "¿Dónde empieza el primer roce con mi partido? Cuando asumo el Rectorado, a un año de gestión, mi mayor crítica fue al Ministerio de Educación; de que el mayor culpable de la imposibilidad que tienen los jóvenes para ingresar directamente a la Universidad Nacional es el pobrísimo nivel académico que ofrece el Ministerio de Educación”. Dispara contra Marta Lafuente, ex titular del MEC, quien hizo público ante la prensa que el presidente Cartes le retiraba su apoyo y le daba la espalda. Todo esto, pese a que –según Froilán– él había trabajado desde la universidad a favor de su candidatura presidencial y crearon el movimiento “HC UNA Pasión”.

–¿Por qué la UNA es vista como un botín político?

–La UNA es un botín político para cualquier partido, estamos en Paraguay y nuestra cultura es el uso racional de los recursos y las posibilidades para hacernos de votos y de medios para ganar votos. La Universidad Nacional tiene 15.000 funcionarios públicos, 15.000 votos posibles ya tenés ahí; 12 departamentos y 22 ciudades (...) hay que hacer buena letra con la UNA porque está en demasiados lugares: 50.000 estudiantes de grado, 8.000 de posgrado, 15.000 funcionarios. Entonces, algún votito, por lo menos 10% si tenemos, ya está bien.

–¿Ud. comparte esa visión?

–No tendría que ser así, absolutamente. Tiene que ser un trabajo político a nivel nacional. Eso sí, yo estoy de acuerdo con que la Universidad Nacional se politice, que haya un pluripartidismo dentro de la universidad, que haya grandes debates. Porque cuánto este Gobierno colaboró con la UNA o con las universidades públicas.

–Cuando habla de politizar la UNA, está hablando de instalar los debates...

–Instalar los debates políticos, invitarles a todos los partidos políticos, y tenemos que escucharles, porque todos los profesores y estudiantes, en su mayoría, están afiliados a un partido. Yo soy colorado hasta el portón de la universidad, atravieso el portón y ya no puedo. Somos hipócritas...

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