29 mar. 2024

En el Este, en la ribera del Paraná deben acarrear agua en baldes

Por Noelia Duarte y Édgar Medina

Negocio.  La venta de agua embotellada tiene gran éxito ante la falta del vital líquido.

Negocio. La venta de agua embotellada tiene gran éxito ante la falta del vital líquido.

CIUDAD DEL ESTE

“Acá nosotros nos peleamos por el agua, ahora con este calor nos avivamos para tener para la limpieza de la casa y otros usos”, fue lo mencionado por una vecina del barrio San Antonio de Ciudad del Este, una de las ciudades más importantes del interior del país que arrastra un enorme déficit en cuanto a provisión de agua potable a la población.

El problema de la falta de agua es frecuente en los barrios y asentamientos próximos a la ribera del Paraná y otros más alejados. Es un flagelo que se arrastra hace décadas y la explicación de los técnicos para la no excavación de pozos comunes o artesianos es que son zonas muy rocosas o sale agua salada. En consecuencia, florece el negocio de agua embotellada.

En pleno siglo XXI, pobladores se ingenian con baldes, tanques y otros recipientes para contar con el vital líquido en sus casas. La Comuna dispone de dos camiones cisternas que recorren esas zonas dos veces a la semana, pero en esta época de mucho calor, la demanda aumenta y los trabajadores recorren desde las 7.00 hasta las 16.30, todos los días.

Cuando hay averías en el motor de agua del Mercado de Abasto también se lleva el vital líquido con los camiones a algunos asentamientos del km 8 Monday de Ciudad del Este y los barrios que dependen exclusivamente de la provisión de la Comuna como San Antonio, San Agustín, San Rafael, San Miguel, un sector del barrio Remansito, numerosos asentamientos urbanos y las guarderías municipales. Estos barrios tienen la particularidad de estar a orillas del río Paraná o Acaray, además de los arroyos Acaraymi y Saltito.

En cada zona existen tanques de 1.000, 2.000 y 5.000 litros que son abastecidos con los camiones de la Comuna que llevan agua de la planta de tratamiento de Itaipú Binacional, en las inmediaciones del Lago de la República.

COBERTURA. La capital departamental tiene 150 proveedoras de agua que son de baja calidad y en los principales distritos del departamento (Ciudad del Este, Minga Guazú, Hernandarias y Presidente Franco) apenas se llega al 28 por ciento de cobertura.

La Empresa de Servicios Sanitarios del Paraguay (Essap) tiene una cobertura reducida, que junto a la Planta de Tratamiento de Agua de la Itaipú abastece a una población estimada de 50.000 habitantes, de los más de 400.000 que tiene la ciudad.

El año pasado el Ente Regulador de Servicios Sanitarios (Erssan) llevó muestras de agua de 114 locales, entre concesionarias, aguaterías privadas, juntas de saneamiento y comisiones vecinales.

Los profesionales de Erssan confirmaron que el nivel de coliformes fecales en el agua que se entrega a la población debe ser cero, algo que es materia pendiente tanto en la aguatera pública como privada. Pero los vecinos que reciben el agua con cisternas de la Municipalidad se quejan de picazones que sufren cuando se asean con el agua. Solo sirve para limpiar la casa y las ropas, señalan.

Graciela Alonso, funcionaria de la Municipalidad, dijo que el agua distribuida en los barrios es la misma que consumen los usuarios de la Essap en el microcentro y áreas habitacionales.

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