Gracias a una llamada telefónica, una persona, cuyo nombre se mantiene oculto por cuestiones de seguridad, se pudo llegar hasta la mujer sindicada como autora del rapto de una menor de dos meses.
La mujer se encontraba en un domicilio ubicado en la compañía Mariscal Estigarribia de 1° de Marzo, departamento de Cordillera. Según el denunciante, quien se comunicó vía telefónica, se enteró de lo ocurrido mediante la prensa. Es así como se la detuvo.
La mujer fue identificada como Elizabeth Vera González de 39 años. Policías acudieron a la dirección facilitada por la persona denunciante y, efectivamente, la encontraron en el domicilio.
De ahí la trasladaron a la Comisaria 15.ª de 1° de Marzo donde debe testificar, dejándola a cargo de la Fiscalía para la investigación del hecho.
EL RAPTO DE LA BEBA
Una pequeña fue arrebatada de su madre cuando asistían a una consulta. Seis horas después, tras una intensa búsqueda fiscal y policial, la niña fue encontrada en la calle completamente mojada, bajo la llovizna. Pobladores de Capiatá escucharon su llanto y la rescataron del abandono.
La madre de la pequeña, Valdina Benítez Rodríguez, conocía a la agresora solo de vista. Ambas mujeres habían visto en un único encuentro, en el mismo nosocomio. La madre de la niña conoció a la victimaria cuando dio a luz. Esa fue la única vez que la vio, hasta este jueves.
Valdina detalló que ayer fue con su beba y sus otras dos hijas para consultas médicas. Fue ahí donde encontró nuevamente a la mujer. La extraña se acercó a decirle que su hija estaba muy grande. Intercambiaron palabras, sin decirse siquiera sus nombres.
En cierto momento, según el relato de la Policía, la madre debía ingresar a consultar para que sus dos hijas más grandes sean asistidas por los médicos, por lo que la extraña le dijo que mientras podía hacerse cargo de la pequeña, hasta que salga del consultorio. Valdina aceptó. Al salir, ni la mujer ni su pequeña estaban en el lugar.
DÓNDE FUE ENCONTRADA
La pequeña fue hallada en el barrio Niño Salvador del Mundo, en el kilómetro 24 de Capiatá. Estaba en la calle completamente mojada, pero con una manta que la refugiaba de alguna manera. Se trata de una zona descampada, compuesta por pocos vecinos. De igual forma escucharon el llanto de un bebé. Fue ahí cuando reportaron a la policía sobre el hallazgo.