Los cartistas reanudan en la fecha contacto con el sector del Frente Guasu y el grupo de liberales capitaneados por el senador Blas Llano, para tratar de definir la enmienda para la reelección presidencial. Ya hay hartazgo en el cartismo, donde hasta empiezan a barajar el plan B ante un escenario poco propicio por la falta de votos y consenso político. El plan B apunta a candidatar a Horacio Cartes como número 1 del Senado y apuntalarlo como futuro presidente de la ANR.
Desde el oficialismo esperan una respuesta de sus aliados de la oposición y señalan que la pelota está en la cancha de Llano y el senador Fernando Lugo. Creen que aún no cierran del todo el acuerdo y está latente la amenaza partidaria de expulsión contra los llanistas, quienes corren peligro de candidatarse para las elecciones en el 2018.
Por de pronto, esta semana no habrá ninguna presentación del proyecto, porque algunos legisladores estarán de viaje. Lo que tratarán es de poner fecha para tratar de conseguir ya la aprobación del plan en plenaria o poner punto final al tema, ya que también deben avanzar con la campaña electoral en vista a que solamente faltan nueve meses para las internas de los partidos políticos.
Llano retornó el jueves pasado de su viaje y todo quedó espectante y sin avances desde el fin de semana.
factor velázquez. En cuanto al senador Julio César Velázquez, algunos colorados dicen que está con la enmienda. Sin embargo, desde el propio entorno del presidente de la República desconfían y dudan de este apoyo y creen que finalmente pasará la factura a la hora de la verdad.
También está pendiente que la Corte Suprema de Justicia resuelva el pedido que hizo el senador Lugo, en diciembre pasado, cuando recurrió una resolución del TSJE que le inhabilita hacer campaña electoral. Si la máxima instancia judicial interpreta que la Constitución Nacional, en su artículo 229, habilita a Lugo rechazando una resolución de la Justicia Electoral no será necesario apoyar la enmienda.
Sin embargo, los propios cartistas señalaron que este camino está difícil porque si Cartes presenta su renuncia seis meses antes no hay seguridad de que haya votos en el Senado para que se le acepte.
El presidente de la Cámara de Diputados, Hugo Velázquez, señaló la semana pasada que ya estaban hartos y que esperan que los negociadores puedan definir el tema.
Toda la campaña con miras a la próxima composición del Congreso está pendiente de lo que se resuelva sobre la enmienda. Hasta el momento, el cartismo sigue dilatando hablar de candidaturas para otros cargos, ya que una vez que empiecen a analizarlas habrá muchas fugas.