02 jul. 2025

El nivel del río llega a 6,55 metros y cubre viviendas de zonas urbanas

La queja generalizada de este grupo de afectados se refiere a la falta de asistencia por la parte de la SEN y de la Comuna capitalina. Los alquileres de pieza se dispararon y oscilan entre G. 800.000 y un millón.

Riada.  En 35ª Proyectada y Antequera, en el barrio Santa Ana, viviendas de dos plantas ya están ganadas por la inundación.

Riada. En 35ª Proyectada y Antequera, en el barrio Santa Ana, viviendas de dos plantas ya están ganadas por la inundación.

La acelerada crecida que afecta a los bañados Norte y Sur de Asunción llegó a 6,55 metros, rebasó el área donde se encuentran las casas precarias de gente humilde que vive casi en el lecho del río para alcanzar la zona habitada por familias que habitan viviendas de material.

Residencias de dos plantas y construcciones de primer nivel van quedando cubiertas por las aguas, sorprendiendo incluso a sus propietarios por la manera rápida y progresiva con que ganan las áreas más altas de la capital.

Los frentistas que hoy están en esta situación indicaron que no reciben asistencia ni de la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN) ni del Consejo Municipal de Emergencias y Desastres de Asunción (Comueda), por el falso concepto de que pertenecen a clases pudientes.

Jorge Méndez, del barrio Sajonia, indicó que “hay muchas personas que viven con lo justo. No porque tienen una casa de material les sobra. Esta inundación sorprendió a todos porque avanza por cuadras en cuestión de horas. Y nadie está preparado económicamente para solventar gastos de alquiler o de mudanza en este momento”.

En este sector de la ciudad, específicamente en Cala’a casi Teniente Bozzano, muchos moradores estaban frente a sus casas o negocios, con la calle anegada enfrente, analizando con vecinos, parientes o amigos dónde reubicarse.

Similar panorama se tiene en el barrio Santa Ana, punto asunceno en el cual la inundación ya llegó a 35 Proyectada y Antequera, amenazando con seguir subiendo para cubrir las residencias ubicadas en el lugar.

La altura de nuestro principal afluente hídrico llegó ayer a los 6,55 metros en el puerto de Asunción, con lo que los damnificados ya ascienden a más de 9.000, según datos proporcionados por el Comueda.

ALQUILERES. El nuevo panorama que se plantea con la riada, alcanzando zonas más urbanas, no hizo otra cosa que disparar el precio de los alquileres, sobre todo de piezas, para recibir a estas familias hasta tanto se produzca el descenso de las aguas.

En una consulta realizada en la zona de Sajonia y de Trinidad se pudo constatar que estas dependencias que hasta hace poco se arrendaban a G. 300.000, hoy treparon a sumas que oscilan entre los G. 800.000 hasta un millón.

Manuel Salu Zarmi, quien debió dejar su casa sobre Cañadón Chaqueño y Última, en Trinidad, dijo que los costos de las piezas están muy altos, pero que no hay otra opción que alquilarlas por la emergencia que les afecta.

El administrador del Comueda, Javier López, puntualizó que “los dueños de estas casas de material son de un mayor poder adquisitivo y pueden alquilar donde ir. El otro grupo tiene menos recursos”.