EFE
Esta capaabsorbe gran parte de la radiación solar ultravioleta, que es dañina para los organismos, protegiendo de esa manera a los seres vivos del planeta.
En un estudio publicado en la revista estadounidense Science, un grupo de investigadores calcularon que el agujero de la capa de ozono a la altura de la Antártida se redujo desde setiembre y octubre de 2000, cuando alcanzó su máximo tamaño, en más de 4 millones de km², equivalente a la mitad de la superficie de EEUU.
“De forma global el agujero de ozono parece estar curándose”, al tiempo que las emisiones de compuestos químicos como los gases clorados y los clorofluorocarbonos siguen disminuyendo, señalan los científicos. Según sus cálculos, la capa de ozono se recuperará completamente en 2050.
La concentración en la atmósfera de estas sustancias químicas que destruyen el ozono bajó de 10 a 15% con respecto al tope registrado a fines de los años 1990, de acuerdo con el último informe cuatrienal de la Organización Meteorológica Mundial. efe