Probablemente habrás visto las llamativas promociones de créditos al instante, esas que te lo entregan incluso “en contados segundos” ... claro, según lo que dice la publicidad. La primera vez que la vi me llamó la atención, porque, las entidades, por lo general, se toman su tiempo para analizar el nivel de riesgo que representa el potencial beneficiario de estos préstamos de consumo.
Coincidentemente participé hace poco en una conferencia de prensa, donde nos proyectaron un video con historias de personas de escasos recursos; obreros, amas de casa, comerciantes que habían sido beneficiados con estos créditos y, supuestamente, lograron progresar. No sé hasta qué punto sea verdad porque se trata de microcréditos que, en la mayoría de los casos, se toman para pagar cuentas antes que para invertir.
Lo cierto es que, tras finalizar la presentación, ya en la ronda de preguntas hice una sencilla consulta: ¿Cuánta es la tasa de interés por estos créditos? Noté que mi intervención no cayó simpática y la respuesta fue con evasivas sin dar el dato concreto. Siguieron hablando de las bondades del crédito y su impacto social hasta que volví a alzar la mano y persistí: “Disculpen que sea insistente, pero no me dieron el dato que pregunté sobre la tasa de interés”.
Por la forma en que la mesa directiva de aquella entidad financiera clavó los ojos en mí, sumada inclusive a la mala cara que me mostraron algunas autoridades del Gobierno allí presentes, por un momento pensé que hasta llamarían a los guardias de aquel lujoso hotel para sacarme a patadas. Finalmente alguien respondió: “43%... porque el nivel de riesgo es alto”, y exactamente allí se terminó la conferencia de prensa.
Al volver a la oficina del diario, me daba vueltas el número en la cabeza. Verifiqué a cuánto estaba el límite máximo no usurario fijado por el Banco Central del Paraguay y ¿adivinen cuánto? ¡¡43,33%!!, exactamente orillando lo legalmente permitido para no caer en la usura.
¿Qué entidades financieras cobran esta tasa tan alta? Miré las tasas de interés que están cobrando todos los bancos y financieras por este tipo de “créditos al instante” otorgados en moneda local y a 12 meses de financiación y al segundo noté que las entidades prestadoras de estos créditos de consumo que lideran el mercado están cobrando ¡43,33%!!
Se me revolvió algo por dentro al recordar la cara del almacenero, la ama de casa o el zapatero que hablaban en el emotivo video visto en horas de la mañana. No porque sea ilegal, pero sí creo que la mayoría de esta gente quizás salió feliz de su banco o financiera porque le dieron en 15 segundos un crédito, pero dudo que sean conscientes de que están pagando algo que está a una milésima de la usura.
Hoy está pasando exactamente lo mismo que ocurrió con el caso de las tarjetas de crédito, que cobraban tasas altísimas hasta que el Congreso tuvo que pararles el carro. Así que la próxima vez que te sientas tentado a tomar uno de estos préstamos al instante, te recuerdo que a veces vale más tomarse unos minutos o incluso horas para analizar tus opciones, que deslumbrarte con unos cuantos segundos.