Por Víctor Ferreira
@VicFerreira77
En medio de un ambiente íntegramente contaminado y donde reina la pobreza avanzan las obras de la segunda etapa de la Costanera Norte de Asunción, que busca recuperar el rostro de la capital del país, que históricamente dio la espalda al río Paraguay.
A un año de iniciarse la construcción de la infraestructura vial, registra un avance del 25% y está en el límite de su cronograma. La obra debe concluir en noviembre del próximo año.
El problema principal que afronta el Consorcio DR Costanera (Benito Roggio-CDD), contratista del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), para la ejecución de los trabajos es que hay atrasos en la liberación de la franja de dominio del trayecto principal e incluso hay riesgo de atrasos.
Así se pudo constatar durante un recorrido de ÚH por la zona de obras. En total, unas 800 familias se ven afectadas por el proyecto, de las cuales 440 corresponden a la traza principal, donde ya se liberaron 320 afectaciones. Es decir, unas 120 familias no llegaron aún a ningún acuerdo con el MOPC para desocupar el tramo, principalmente porque están disconformes con las indemnizaciones que percibirán.
Otros avivados se instalaron recientemente en la franja con el único fin de percibir las compensaciones. “Tenemos todavía expropiaciones pendientes en la zona de San Estanislao y en Azteca 1 y 2. En Blanco Cué ya tenemos 99% liberado, solo faltan tres o cuatro familias que se tienen que negociar, pero el resto ya está. Solamente esa parte falta completar el refulado, ya tenemos ya casi 85% de avance en cuanto a refulado”, expresó el ingeniero René Gómez, responsable del proyecto por la contratista.
PROYECTO DEFICIENTE. Además, la Costanera II se licitó con un proyecto deficiente que tuvo que ser mejorado sustancialmente, especialmente en lo que se refiere a los accesos (ver detalles en infografía).
Según explicó Gómez, se agregaron dos viaductos –uno de 1300 metros y otro de 400 metros en la zona del Botánico–, lo cual significa un encarecimiento del 13% respecto al costo inicial. El costo de la adjudicación es de G. 361.575 millones (USD 65,7 millones al cambio actual) y el monto del encarecimiento es de más de 47.000 millones (USD 8,5 millones).
Vale señalar que en el proyecto inicial se previó un túnel de conexión con Primer Presidente, pero que finalmente no se ejecutará, porque en dicha zona se encuentran importantes aductoras de Essap, que si se destruían iba a generar millonarios sobrecostos.
Gómez dijo que por eso se optó por un viaducto de 1.300 metros, cuyo costo será de unos USD 11 millones, y dará solución a tres cruces conflictivos (Acceso a Zeballos Cue, Artígas y Sacramento). En cuanto al viaducto de 400 metros, tendrá un costo de unos USD 3 millones y se tuvo que implementar para evitar un caos en el cruce de Primer Presidente (tendrá un carril para dirigirse hacia Asunción).
Explicó que tuvieron que hacer recortes de obras innecesarias para que sea factible la construcción de los viaductos mencionados. Por ejemplo, se dejará de hacer el pedraplen (lado del río) que debía estar constituida “por enormes piedras lanzadas de protección del pie del terraplén”.
“Hay que pensar en el desarrollo inmobiliario”
El arquitecto Víctor González Acosta, desarrollador inmobiliario, afirmó que las obras de la segunda etapa de la Costanera es un gran proyecto para integrar la ciudad al río. “Asunción ha estado dando su espalda al río por tanto tiempo, y hoy eso se revierte y se pone en valor un activo importantísimo que es el agua y más aun considerando que todo ese sistema de humedales que tenemos ahí es un valor importante”, dijo.
Resaltó: “Hay que pensar en el desarrollo inmobiliario de la zona. Es importante por el bien público ese espacio y no dejarlo sujeto a la especulación del suelo, que es el bien mayor. El trabajo de la Municipalidad es muy importante para regular cuidadosamente el uso del suelo”, expresó.
Alegó además que “hay que tomar con mucho cuidado el desarrollo que vayamos a implantar ahí; lo primero que se debe hacer es darle prioridad a la ciudad, con espacios de esparcimiento y de expansión, que mantenga ese vínculo entre la ciudad y el agua”. En ese sentido, el profesional enfatizó: “Hay que pensar en un proyecto o un máster plan que equilibre esos aspectos que van a estar interviniendo, sobre todo el punto de vista ambiental, ecosistema y el aspecto social de la gente que hoy vive ahí. El desarrollo debe ser sustentable, ver la parte social, ambiental y económica. La Comuna debe identificar la zona y las oportunidades”, añadió.
Financista dio luz verde a los cambios en el proyecto
Las obras de la segunda etapa de la Costanera Norte de Asunción están siendo financiadas por el Fondo de Convergencia Estructural del Mercosur (Focem), que ya dio luz verde a los cambios del proyecto, según informó Obras Públicas. El organismo otorgó su no objeción a la modificación del contrato para la construcción de un viaducto en la zona del Jardín Botánico de Asunción.
Recordemos que, según datos de la cartera, el organismo financiará el 85% del monto del proyecto y el 15% serán fondos locales del Tesoro. El costo total del proyecto asciende a USD 116.598.275, que incluye el costo de las obras, la fiscalización, gestión ambiental e indemnizaciones a los bañadenses afectados. El aporte no reembolsable del Focem es de USD 83.242.689.
Los bañadenses afectados por el proyecto tienen la opción de acceder a una vivienda o el pago de indemnizaciones. Vale señalar que la Consultora Guaraní es la empresa que tiene a su cargo el Plan de Gestión Ambiental, por un monto de G. 2.861 millones. Mientras que el Consorcio EHT es el responsable de la fiscalización, por un contrato de G 11.318 millones.
La contratista que ejecuta los trabajos, el Consorcio DR Costanera (Benito Roggio-CDD), considera que pueden surgir más cambios. “Las modificaciones implicaron una incidencia del 13% sobre el costo de la obra, que se podría ir incrementando, porque se trata de una zona urbana. Por ejemplo, en la zona del Botánico, tenemos redes de alcantarillado sanitario de Essap que en cada día de lluvia se satura, ahí sale una gran cantidad de agua como se pudo notar en varias ocasiones. Eso debe ser intervenido para sacar el volcán de agua”, expresó el ingeniero René Gómez, responsable de la obra.
