El concurso tuvo el lema; “Derechos humanos, para no dejar a nadie atrás” y consideró la participación de fotógrafos profesionales y no profesionales con imágenes que guardaran relación con los derechos humanos. La fotografía premiada fue tomada en la Escuela Básica Graduada Yakapoty de Curuguaty; en ella se observa a niños en un aula que se encuentra en pésimas condiciones. Cabral explicó que la fotografía tiene relación con los derechos humanos considerando que la educación es fundamental para el desarrollo de las personas.