23 abr. 2024

Cooperativas de producción

Difícilmente puede ser subestimada la importancia de las cooperativas en nuestro país, especialmente, las de producción y, específicamente, las de tipo A, vale decir las más grandes y mejor organizadas entre ellas. Tienen gran influencia en economía y finanzas así como en sociedad y Estado en Paraguay. De una reciente y breve autopresentación del poderío económico-financiero de las cooperativas de producción puede citarse lo siguiente: El 80% de la producción de leche, el 23% de la de carne roja y el 11% de las exportaciones agropecuarias del país provienen de este sector.

FECOPROD. La organización que las representa lleva por nombre Federación de Cooperativas de Producción Ltda. (Fecoprod). Veamos aquí algunas de las variables económico-financieras y demográficas de las cooperativas afiliadas a ella:

• En el 2014, los últimos datos disponibles dan cuenta de que tienen casi 77.000 asociados entre “socios productores” y “no productores” (cooperativas de ahorro y crédito).

• En ese mismo año habían contratado, en cifras redondeadas, a unas 10.360 personas, de las cuales unas 7.800 eran varones y unas 2.560 mujeres. Entre ellos, unos 9.680 eran contratados permanentes y unos 680 ocasionales.

• Sus principales rubros de producción se subdividen en agrícolas (soja, trigo y maíz) y ganaderos (bovino, porcino y ovino).

• En el 2014 se destinaron –en cifras redondeadas– 1,5 millones de hectáreas al ganado bovino; 443.000 hectáreas a la soja; 216.000 al trigo; 90.000 al maíz; 67.000 al ganado porcino y unas 8.000 al ovino.

• La cartera de activos a fines del 2014 presentaba unos 2.240 millones de dólares. Al descontar la financiación de activo con recursos externos, el patrimonio neto resultante sumaba 683 millones de dólares en ese año.

CUATRO DÉCADAS. Al cumplirse 40 años de la constitución de dicha organización representativa de las cooperativas de producción, es oportuno reproducir aquí lo escrito en su libro Fecoprod: Del sueño de vivir mejor a la construcción de una pujante realidad, escrito por Víctor-Jacinto Flecha con la colaboración de socios de las cooperativas y publicado por la Editorial Servilibro en marzo del 2016, Asunción:

“… Las hoy florecientes cooperativas no nacieron por generación espontánea, sino que es el resultado de un largo proceso de esfuerzo mancomunado de sus socios. Repasar las historias de las colonias agrícolas, ya sean estas de origen religioso, como los menonitas, u originarios de países como Alemania, Japón, Brasil, entre otros, es descubrir la titánica lucha por la sobrevivencia en lugares selváticos, aislados, sin caminos y en la mayoría de los casos sin alimentos suficientes”.

PRIMEROS PASOS. Para la constitución de la misma, se reunió la Asamblea General de la Federación de Cooperativas Productivas del Paraguay, en los salones del Unión Club de Asunción, con la participación de representantes de cooperativas del país y la asistencia del ministro de Agricultura y Ganadería, Hernando Bertoni, y otras autoridades nacionales de los sectores público y privado.

Al poco tiempo se logró la cooperación de la alemana Fundación Konrad Adenauer, con la que se empezó la asistencia internacional en cursos de capacitación a dirigentes, administradores, funcionarios y socios en general en la perspectiva del crecimiento de cada una de las cooperativas.

LAS PIONERAS. Las primeras cooperativas en Paraguay surgieron con la llegada de los menonitas en 1926/27, que fundaron la colonia Menno, Chortizer, al amparo de la Ley Nº 514/1921, por la que se les otorgaba libertad de religión, lengua, educación, liberadas del servicio militar, entre otros beneficios. Posteriormente, en 1931, se constituyó otra colonia menonita como Sociedad Cooperativa Colonizadora Fernheim. La primera en tener reconocimiento por Decreto Ley Nº 13635/41 fue la Agroindustrial Ideal Ltda., viticultora y fabricante de vino, en Villarrica.

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