Michel Biquard, director de Invesco, que también construye el edificio Start sobre la calle Bulnes, destacó que el Art tendrá una característica única en Asunción, que es la de contar con 300 cocheras, es decir más de dos cocheras disponibles por departamento, que se suman a los amenities tradicionales como pileta, gimnasio, spa, parrillero, dos salones de uso múltiple, salón para adolescentes y para niños. Otro detalle que lo diferenciará de otros edificios es que toda la planta baja será comercial, con locales orientados a prestar servicios a quienes vivan en el edificio, dijo.
“Lo estamos haciendo en fideicomiso, donde Banco Atlas es el fiduciario; es un proyecto que arrancará en el primer semestre de 2016 y permitirá que mucha gente que vive fuera de Asunción y trabaja en este barrio, pueda vivir también en el barrio”, señaló.
EL EDIFICIO. Biquard reveló que Art tendrá dos torres de 20 pisos desde la planta baja, con 65 departamentos cada torre con precios que están en el orden de 2.000 dólares el m2, precio que incluye una cochera por departamento. El edificio arranca con departamentos pequeños de 60 m2, otros de 100 m2 y de 130 m2, de 1, 2 y 3 dormitorios, que son más amplios.
Para el empresario, un punto atractivo para el comprador es el acuerdo al que se puede acceder, porque al ser un fideicomiso, el sistema de financiamiento permite con sólo 10% del valor del departamento, poder sentirse dueño de él.
“Durante los 36 meses de obra, el comprador desembolsa en total 20% más, que son intereses pero progresivos. Es decir, en un departamento del orden de 220.000 dólares el interesado paga 22.000 dólares, que es el 10%; esos fondos entran a ser administrados por el fideicomiso y el banco que financia, que puede ser Atlas, Sudameris o algún otro, le cobra interés solo por los desembolsos que hace” explicó.
Agregó que en ese caso, el banco pone 20% y el que compra el departamento de 220.000 dólares paga una cuota de 440 dólares, que va creciendo hasta el mes 36 y termina siendo una cuota de 1.500 dólares mensuales.
“Eso le permite, al comprador, pensar en mudarse a un edificio que está construyéndose, que va a tener en 3 años, pero desembolsando durante la obra solo el 30%. Cuando se cumple el plazo y entregamos el departamento elige cancelar todo o cancela una parte, o la posibilidad de tomar una hipoteca para cancelar”, concluyó.
