La libélula, conocida en nuestro país como ñahatí es una natural depredadora de insectos. El trabajo comienza bajo el agua, cuando las ninfas devoran las larvas de los mosquitos.
Una vez adultas, “cazan” a los mosquitos al vuelo, sin darles chance de escapatoria. Es por eso que quieren contar con las libélulas en la lucha contra el mosquito Aedes aegypti, vector del dengue.
La crotalaria juncea es considerada una planta “mágica” para la lucha contra los mosquitos, puesto que atrae a las libélulas. Es por eso que el concejal del Partido Colorado, José Alvarenga Bonzi, pretende el cultivo de la misma en los paseos centrales, plazas, parques y veredas de la toda la ciudad capital.
“Se trata de un controlador biológico, porque la crotalaria juncea atrae a las libélulas y genera las condiciones necesarias para su reproducción.”, expresó el edil en comunicación con Telefuturo.
En Brasil, la prefectura de Sao José do Río Preto del estado de Sao Paulo implementó con éxito este sistema para combatir al dengue, distribuyendo ejemplares de la planta a la población. La intención es comprar semillas para esta temporada y contar ya con plantines para el siguiente verano.
“Tenemos viveros en el jardín botánico donde vamos a hacer plantines y producir semillas, comentó Alvarenga y añadió que servirá para paliar el uso de insecticidas que provocan un gran daño ambiental.