13 may. 2025

Comuna deja de recoger por día unas 300 toneladas de basura en Asunción

Calles y veredas de la ciudad están colmadas de basura. Numerosos barrios asuncenos, incluyendo al microcentro capitalino, padecen un déficit acuciante en la recolección de los residuos de todo tipo.

Refugios.  En las cercanías de los albergues se acumula  la mayor cantidad de basura, que excede a la capacidad del Municipio.

Refugios. En las cercanías de los albergues se acumula la mayor cantidad de basura, que excede a la capacidad del Municipio.

Déficit que admite el propio director de la Unidad de Aseo Urbano de la Municipalidad de Asunción, Rodrigo Velázquez.

Y lanza un dato revelador: “entre 200 a 300 toneladas de basura se dejan de recoger, por día, por la falta de infraestructura”.

A la típica acumulación de basura en exceso, posterior a las fiestas de fin de año, se sumaron –dice– los eventos climatológicos que ocasionan la caída de árboles que “distraen” los trabajos de recolección.

La Comuna solo cuenta con 26 camiones recolectores –de los cuales seis son alquilados– y con “una sola pala cargadora” para toda la capital.

En este momento, el Municipio “hace lo que puede”, confiesa el director municipal. “Estamos rebasados en nuestra capacidad operativa, porque no tenemos las herramientas y el equipamiento logístico como para poder atender todos los reclamos”, lamenta.

MINIVERTEDEROS. Otro componente, añade, que agrava la situación es la gran cantidad de residuos acumulados, principalmente, en los alrededores de los refugios de los damnificados por la inundación.

Es que, en su mayoría, los pobladores de los bañados –hoy bajo agua– se dedican al reciclado. Como ahora ya no pueden llevar a sus patios o baldíos de la ribera, depositan los desperdicios en la vía pública. En varios puntos cercanos a los improvisados albergues (como el que está detrás del cementerio de Barrio Obrero) se entremezclan residuos domiciliarios con ramas de árboles, formando enormes montañas de basura.

Identificaron, dice, entre 250 a 300 minivertederos clandestinos en diferentes puntos de la ciudad. En estos lugares, incluso, se arroja la basura de otros distritos.

“Después de los temporales tenemos muchos árboles caídos, ramas y mucha gente limpia sus patios y saca a la calle toda la basura, más la que se genera en esta época. Y se recurre a los carriteros que distribuyen (los residuos) en cualquier parte”, apunta.

Con las copiosas lluvias, que producen poderosos raudales, toda esa basura se desparrama hacia distintos tramos de la ciudad.

“La capacidad operativa y los recursos con que contamos son limitados y estamos totalmente superados”, remarca.

Hace falta redoblar –agrega– la flota de camiones para brindar un óptimo servicio de recolección. “Se necesitan 20 recolectores más, el doble de nuestra flota, porque solo 17 vehículos son nuevos”, señala. El resto funciona con suerte.