El experto brasileño ofreció una charla ayer en el local de la Secretaría del Ambiente (Seam). En la oportunidad, discutió con otros técnicos el tema Sustentabilidad de las Bolsas de Polietileno para Supermercados y Comercios.
Bahiense compartió la experiencia de Brasil, donde el tema se empezó a debatir desde el 2007. Diez años después los avances son significativos, y Paraguay puede observar la experiencia del país vecino para analizar qué pasos seguir a partir de ahora.
El experto dijo que tras la regulación de la venta de las bolsas en los supermercados, lo ideal es promover una legislación que establezca criterios técnicos de calidad de las bolsas.
La experiencia mostró que las personas igualmente compran las bolsas que creen necesarias si las mismas no soportan la cantidad de artículos que llevan, explicó. Esto se ajusta tanto a las bolsas de plástico como a las biodegradables, precisó Bahiense.
Así también en Brasil se vio el fenómeno de que la gente prefiere comprar en los lugares donde hay bolsas de calidad y por ende requieren de menor cantidad de bolsas, explicó. En algunos estados se tienen normativas similares a las de Paraguay. Allí, las primeras dos bolsas son gratuitas, comentó Bahiense.
Con respecto a la materia prima en sí, dijo que “hay un pensamiento de que lo biodegradable es mejor y que el plástico perjudica”, dijo. “Tenemos que tener una visión general y mucha información”, agregó.
Afirmó luego que las bolsas biodegradables se pueden destruir únicamente con máquinas que no hay en Paraguay ni Brasil. Usar otro mecanismo de destrucción de este material producirá aún mayor contaminación que los materiales de bolsa más comunes, aseguró. “Podemos cambiar la materia prima, pero los problemas van a continuar”, indicó e insistió sobre el tema de la calidad de los productos.
En virtud a una ley, en Paraguay desde abril está vigente una resolución emitida por el Ministerio de Industria y Comercio, referente al cobro de las bolsas de polietileno en todos los establecimientos comerciales. Las tres primeras serán gratuitas y a partir de la cuarta deberán abonar desde G. 100 hasta G. 250 guaraníes, dependiendo del tamaño.