Siempre a modo de ilustración, un obrero que tiene la suerte de percibir salario mínimo (1 de cada 2 asalariados no alcanza el mínimo a nivel país), debe juntar 60 sueldos mensuales o 5 años, para alcanzar lo que percibe un director de Itaipú en un solo mes.
El director general paraguayo, James Spalding Hellmers, alcanza la friolera suma de G. 106.871.738, que sumado al vale de alimentación de G. 2.050.400, alcanza un total de G. 108.922.138.
reajuste anual. La vigencia de estos montos es desde mayo pasado, respondiendo a una política de elevarlos cada año a un ritmo promedio de 10%. Hace 5 años, el salario base del director general ascendía a un poco más de G. 69 millones.
Los directores de áreas perciben G. 103.186.506 como base, que sumados a otras bonificaciones sobrepasan los G. 105 millones.
Los consejeros, por su parte, perciben como mínimo G. 82 millones, cantidad muy alejada de la remuneración que hasta altos directivos de grandes empresas privadas podrían aspirar en Paraguay. Vale recordar que los miembros del Consejo de Administración (ver nómina en infografía) son cupos políticos.
Los ingenieros y mecánicos que trabajan en el mantenimiento de la usina ganan entre G. 25 y G. 60 millones.
Extras. La binacional ofrece más de 10 beneficios adicionales al salario propiamente dicho. Entre otros conceptos, se pagan extras por ayuda habitacional, vacaciones, alimentación, penosidad, responsabilidad y otros.
Desde ambas hidroeléctricas siempre se negaron a dar la lista de sus funcionarios, la política de recursos humanos para las contrataciones y menos aún los salarios que se pagan, pero por orden del presidente Horacio Cartes, decidieron hacer públicos los registros, mientras la Corte Suprema de Justicia defina sobre la acción de inconstitucionalidad.
La actual administración de Itaipú prometió, de ahora en más, llenar las vacancias vía concurso público de méritos.
