Por Carlos Elbo Morales
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Llegó con el rostro cansado y en silencio. Sin embargo, todo quedó atrás y con vitalidad y frescura Édgar Vivar, el Señor Barriga, cautivó al auditorio de 4.000 jóvenes estudiantes que siguieron atentamente su charla sobre el bullying, organizada por la Fundación Vuelve a Soñar. “Ya no quería ir a la escuela. Incluso pensé en quitarme la vida”, dijo sin rodeos al contar hasta qué punto el acoso estudiantil lo agobiaba cuando iba a clases.
El impulso. La experiencia vivida y la popularidad de su personaje se combinaron para que Vivar recorra varios países hablando de esta problemática. El impulso vino de una charla que tuvo con el tenor Plácido Domingo cuando estuvo en México. "Él me había dicho: ‘Ustedes (los protagonistas de la vecindad del Chavo) tienen una enorme llegada al público de todas las edades. Deberían hacer algo. Quien no sirve para servir, no sirve para vivir. Y eso me caló. Pensé que podía compartir algo de mi historia. Y no pretendo más que servir de inspiración. Lo que viví fue el instrumento cuando decidí hacer esto”, recuerda el intérprete de Ñoño en una conversación con ÚH, luego de culminada su charla.
“El bullying no es bueno. Mata y destruye a la víctima y al victimario. También es una enfermedad social que aísla a la gente”, dijo Vivar a los jóvenes que lo escucharon atentamente. En un momento dado, el actor solicitó a todos los que filmaban o tomaban fotos con sus teléfonos, que los guardaran. “Vivamos el aquí y ahora. Cada momento es único e irrepetible”, sugirió al auditorio que siguió su consejo.
Alerta. Cuando padecía bullying, el Señor Barriga, contó que se negaba a contárselo a sus padres. Fue una abuela suya quien se enteró de lo que ocurría e intervino para acabar con la situación. Recomienda a los padres estar alertas ante esta situación. A ello le suma que uno debe conocer lo que uno vale . “En la época que lo sufrí no había ninguna noticia. Ahora hay conciencia de que hace estragos en la persona. Si lo están sufriendo, deben de pedir ayuda. Saber que tienen valores más allá de lo visible y que no hay motivo para ser víctima de bullying”.
Para el dueño de la vecindad del Chavo, estar frente al público en el escenario es algo hermoso y un compromiso. Pero también es un aliciente para seguir haciendo cosas buenas que aporten a la gente y que esté más allá de la diversión. Y en sus palabras de despedida, la ovación acompañó la referencia a su personaje más famoso. “Cada uno de ustedes son diferentes. Pero puedo decirles que todos viven aquí dentro del corazón del Señor Barriga y no pagan la renta”.
