03 jul. 2025

Barack Obama, presidente de EEUU, inicia una histórica visita a Cuba

El presidente de EEUU, Barack Obama, emprende hoy una gira que habría sido imposible cuando asumió el poder en 2009: un histórico viaje a Cuba para afianzar el acercamiento bilateral y una visita a Argentina para impulsar una relación que estuvo llena de tensión durante casi todo su mandato.

Obama llega hoy a Cuba y el martes se desplazará a Argentina en un viaje pensado para reforzar su legado hacia Latinoamérica, diez meses antes de que deje la Casa Blanca.

Será el primer presidente de EEUU en pisar suelo cubano en 88 años y el primero que visita Argentina en 19, algo que según la Casa Blanca demuestra que Obama cumplió su promesa electoral de iniciar una “nueva era de cooperación” con el continente.

Acompañado de su esposa Michelle, sus hijas Sasha y Malia y su suegra, Marian Robinson, Obama llegará esta tarde a La Habana y se dirigirá inmediatamente a la embajada estadounidense, reabierta tras el restablecimiento de las relaciones el pasado julio, para reunirse con el personal.

A continuación, Obama y su esposa pasearán por La Habana Vieja y visitarán la catedral, donde les recibirá el cardenal Jaime Ortega.

Su agenda oficial comenzará el lunes con una visita al monumento a José Martí y una reunión con el presidente cubano, Raúl Castro.

Obama será “muy franco” con Castro “sobre las áreas en las que hay desacuerdo”, incluidos “los derechos humanos”, según aseguró su asesor adjunto de seguridad nacional, Ben Rhodes.

Ambos abordarán los avances en la relación y las posibilidades de cooperación económica, además de temas como las negociaciones de paz que el Gobierno colombiano y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) mantienen en Cuba.

Asistirá después a una conferencia con cubanos que trabajan en el naciente sector privado de la isla y empresarios estadounidenses, y cerrará la jornada con una cena de Estado.

El momento más esperado llegará el martes, cuando Obama de un discurso televisado en el que hablará directamente al pueblo cubano y dejará claro que EEUU no va a promover un “cambio de régimen” en la isla, según Rhodes.

Después se reunirá con un grupo de disidentes y otros activistas cubanos, y aunque la Casa Blanca no ha hecho pública la lista de los invitados, asegura que el Gobierno cubano no ha influido en ella.

El viaje de Obama se cerrará con un toque ligero en el estadio Latinoamericano de La Habana, donde presenciará un partido amistoso de béisbol, una pasión común de ambos países.

El viaje podría incluso contribuir al levantamiento del embargo, aunque es improbable que haya avances concretos hasta “después de las elecciones” presidenciales de noviembre, según dijo a Efe la senadora que lidera el esfuerzo para acabar con las restricciones comerciales en la Cámara Alta, Amy Klobuchar.