GRAN ARRANQUE. Olimpia tuvo 15' de muy buen rendimiento. Fue agresivo en la marca, preciso y punzante con la pelota, tratando de desbordar por los dos extremos. No hizo diferencia en el marcador, no tuvo una ocasión muy clara para convertir, pero sorprendió la actitud con que inició el partido.
Ese lapso fue lo mejor que se vio futbolísticamente en este tercer ciclo de Pumpido.
BUENA LECTURA. Libertad salió del acoso, de la presión al cual fue sometido y logró el equilibrio en el trámite de juego, no precisamente con alguna variante que provino de la banca. Zafó de la incómada situación, liderado por el experimentado Sergio Aquino. Este ordenó a su equipo con su sapiencia y criterio para manejar las acciones y a partir de ahí los visitantes fueron levemente superiores.
Cambios ambiciosos. En el complemento se vivieron las situaciones más emotivas del juego. Pumpido puso en cancha a Salgueiro, Ramírez y Diego Centurión y con eso su equipo recobró protagonismo y tuvo ocasiones para desnivelar. Antes, Guerreño tuvo a maltraer a los defensores gumarelos, tanto que tres fueron amonestados por causa del juvenil. Uno de ellos fue Benegas, quien en otra acción debió ser amonestado nuevamente y justo fue el que terminó anotando el gol.