Pablo Emilio Escobar Gaviria fue fundador y máximo líder del Cartel de Medellín. Nació el 1 de diciembre de 1949. Murió en 1993, un día después de su cumpleaños.
Odiado por muchos y adorado por otros, Pablo Escobar vivió sus días como mejor lo pudo hacer. Con una mente ágil y objetivos impuestos, logró marcar su paso en la tierra, pese a sus grandes ambiciones, que lo llevaron a morir sobre un techo en Medellín.
Un operativo policial actuó y el capo narco, en su intento de fuga, cayó muerto y hasta la fecha no hay otro capo de la droga que llegue a su nivel de poder y ambición.
Hace 23 años que Escobar pasaba a la historia tras haber muerto sobre un techo, como no había imaginado terminar sus días. La Policía actuó e incluso disfrutó de su muerte. No esperaron a notar que el cuerpo estaba sin vida para tomarse fotos con el cadáver del “rey de la droga”, según publica El Tiempo.
Era el delincuente más perseguido del mundo. Fue uno de los grandes caballeros de la droga en Colombia y pionero de los grandes carteles, es decir, el jefe más poderoso del narcotráfico.
Fue líder de los carteles más grandes de la historia del narcotráfico y generó miles de dólares a través de sus negocios ilícitos, convirtiendo el comercio de la droga en un monopolio. Muchas personas que se enfrentaron al capo narco pagaron con su vida aquella intención de terminar con el negocio que destruía a todo un pueblo.
Hasta la fecha no hay otro Pablo Escobar en Colombia, pero sí existen varios distribuidores de cocaína que dejan a varios jóvenes perdidos entre la droga y la realidad.