Al grito de “¡fuera Moreno fuera!” y “el pueblo unido jamás será vencido”, la multitud indígena inició una marcha poco antes del mediodía en el parque de El Arbolito y se sumó a otra de sindicatos en la Avenida 10 de Agosto, que confluyeron en una marea humana hacia la ciudad vieja de la capital. El objetivo de los manifestantes era a toda cosa acceder a la Plaza Grande y el aledaño Palacio de Carondelet, sede del Gobierno, pero el trazado colonial en cuadrícula que emana desde ese lugar estaba reforzado por diferentes cordones de seguridad, y en cada esquina había una numerosa presencia policial detrás de grandes vallas, que en algunos casos, eran reforzadas con alambrado de espinas.
Las órdenes de las fuerzas de seguridad eran impedir el acceso de los movilizados al emblemático edificio de la Presidencia, pero a medida que los concentrados se iban acercando se producían forcejeos con los policías.
La marcha la encabezaban por movimientos indígenas, aunque a ella se sumaron diferentes grupos sociales, que intentaban romper el cerco en su avance, en general de manera pacífica, según habían pedido sus dirigentes, y en algunos puntos lo lograron mientras los uniformados observaban transcurrir la procesión que aplaudía. En las marchas de indígenas por el centro histórico se podían leer pancartas que rezaban “Sin justicia social no hay paz. Fuera el FMI” o “Ecuador libre de minería”, y muchos portaban banderas multicolores de los pueblos ancestrales, mientras otros aprovechaban para vender mascarillas sanitarias por 25 centavos de dólar.
Ecuador vive una jornada de protesta nacional por la retirada del subsidio a las gasolinas y el anuncio del envío al Parlamento de reformas económicas y laborales, lo que provocó el estallido de manifestaciones que, desde el jueves, dejaron 766 detenidos.
ONU mantiene reuniones para restablecer el orden en Quito
El sistema de Naciones Unidas junto con la Conferencia Episcopal Ecuatoriana mantuvieron reuniones preliminares con distintas organizaciones de la sociedad a fin de restablecer el orden y evitar una escalada de la violencia. Así lo informó el sistema de la ONU en Ecuador y precisa que el objeto de estas conversaciones es garantizar condiciones para una protesta pacífica, respeto a los derechos humanos y a las libertades fundamentales. Los presidentes de Perú y Chile mantendrán una reunión donde abordarán la crisis ecuatoriana. De igual manera los cancilleres de Colombia y de EEUU analizarán la situación que atraviesa Ecuador. Brasil y Panamá dieron su respaldo al presidente Moreno.