Así lo especifican José Szwako, presidente de Cámara Paraguaya de Comercio Electrónico, y algunos referentes que debieron reinventarse desde sus rubros tradicionales a la modalidad digital para continuar el negocio, deprimido durante la cuarentena más cerrada.
Si uno observa la manera en que fueron colocados en las últimas semanas los productos, mediante delivery y gracias a que los usuarios utilizaron las páginas webs, las redes sociales y hasta wasap, ello no significa que se vendió más, sino que algunas empresas pudieron asegurar la transacción con el fin de alcanzar las utilidades para pagar a sus funcionarios o reinvertir en más stock, según mencionó.
“De todos modos, si bien algunas empresas lograron alcanzar sus metas mensuales con la modalidad de ventas online, aún resultan la minoría”, destacó Szwako, ya que falta más inversión en el canal digital.
Además, al medir el pulso de dinamismo en la venta de productos desde que se inició la lucha contra la pandemia, debemos diferenciar dos tipos, según el referente: los artículos básicos y los que no son de primera necesidad.
Los rubros pertenecientes a farmacias y supermercados están englobados en el primer grupo, y se vendieron de 3 a 5 veces más en la cuarentena cerrada; mientras que ni bien comenzó la cuarentena inteligente se agregaron los no básicos y éstos se comercializaron de 2 a 3 veces más, según acotó.
Por su parte, Édgar Colmán, de la Dirección Nacional de Emprendedurismo (Dinaem), dependiente del MIC, refirió que se concretaron acuerdos con plataformas tecnológicas Marketplace, como Yo por ti tú por mí, Kolau y otras, donde los emprendedores pueden comercializar sus productos.
“Apoyamos y promocionamos el acceso al e-commerce y las plataformas digitales, además de lanzar en breve con el Ministerio de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (Mitic) el programa Espacio Emprendedor, que permitirá pautar espacios en el canal Paraguay TV de manera gratuita”, agregó.
El funcionario destacó además que se percibe, frente a la fuerte disminución de las transacciones, un mejor posicionamiento en el mercado de empresas mejor preparadas y con acceso a las nuevas tecnologías, “las que pudieron sortear estos meses y se volcaron al comercio electrónico como medio alternativo”.
