En varias casas de cambio de Caracas, los venezolanos se mostraban satisfechos de la apertura que supone el nuevo sistema, que permite a cualquier ciudadano, tras rellenar un formulario y presentar su cédula de identidad, adquirir un máximo de 300 dólares diarios a un cambio ligeramente inferior al del mercado paralelo o ilegal. En el primer día de funcionamiento el cambio fue de 172,05 bolívares por dólar, una cantidad casi 30 veces superior a 6,3 bolívares por dólar del primer cambio oficial más bajo y 15 veces mayor que la del segundo tipo oficial, denominado Sicad y fijado en 12 bolívares por dólar. Aún así, el cambio del Simadi resultaba más beneficioso para el comprador que los 188,96 bolívares que costaba adquirir la moneda estadounidense en el mercado paralelo o ilegal, con la ventaja de representar una alternativa legal y con garantías. Los responsables de una casa de cambio del este de Caracas, en la que un flamante panel reflejaba la cotización en el Simadi de cada divisa extranjera, indicaron que registraban una buena afluencia de gente y que las operaciones cambiarias se estaban realizando normalmente. efe