“Ni siquiera podemos comprar en las pocas despensas y los almacenes que existen en nuestra compañía, porque los dueños no atienden por miedo a contagiarse de nosotros”, explicó a Última Hora la pobladora Liza Barrios, quien hizo de vocera de los vecinos que viven junto al cementerio, donde se encuentra el panteón del fallecido.
La pobladora Marilia Giménez, de San José de los Arroyos, relató ayer con preocupación que sus familiares que residen en Itapirú le pidieron que les haga llegar alimentos, pero no pudo hacerlo debido a que la barrera policial no permite el paso. El locutor Mario Reinaldo, de la emisora Manduvirá, propuso que las autoridades organicen un sistema de postas, para que los donantes dejen los víveres a la Policía, junto a la valla, para que desde allí se pueda trasladar a quienes necesiten.
En una “reunión de emergencia”, el intendente de Arroyos y Esteros dialogó con el director de la Tercera Región Sanitaria de Cordillera, Eduardo Jara, autoridades de la Fiscalía, la Policía, del puesto de salud local y el representante de la comunidad, el docente Gustavo Torres.
“El Dr. Eduardo Jara manifestó que pidió un informe a los responsables de la funeraria (que trasladaron al paciente fallecido hasta Itapirú), quienes manifestaron que se manejaron todos los casos de acuerdo al protocolo para casos de Covid-19, por lo tanto, el féretro se encuentra totalmente enchapado y sellado herméticamente. A pedido de la población, el intendente se comprometió a construir alrededor del panteón nuevas paredes, revocar y cerrar completamente”, informó la Comuna.