El predio en general, ex Capasa y ahora propiedad del Ministerio de Hacienda, es ocupado por unas 70 familias ribereñas. Afirman que en la zona hay inseguridad y pululan los desechos. Moradores del sitio aseguran que ya están allí hace más de siete años y anhelan se concreten en el lugar viviendas dignas, ya que las áreas que habitaban son zonas que volverán a inundarse.
En la Municipalidad de Asunción se aprobó la orden de desalojo hace un año. Sin embargo, el director de Asesoría Jurídica, Benito Torres indicó que por el problema social “es un volver a empezar”. Dijo que tras comunicación con esta hoja irían funcionarios del Área Social a recabar datos.
“Es un problema de larga data. El tema es que el remedio es peor que la enfermedad. Como las tres arterias tienen pendientes y si se procedía a la apertura, se iba a crear un raudal capaz de arrastrar hasta autos. Por lo tanto se tendría que hacer trabajo de entubamiento y en el barranco hacer un anfiteatro, un proyecto que surgió en 2014 pero no se concretó por falta de presupuesto”, sostuvo.
Sobre el asentamiento, indicó que solo una parte de las viviendas están en área de la calle y la otra en el terreno que pertenece a Hacienda. “Ni por más orden de desalojo que tengamos la policía no acompañará si no tienen un lugar donde quedar, salvo que sea una invasión de días o semanas y no como en este caso que estarían ya desde el 2016. Por eso irá la gente de Área Social para un relevamiento de datos de la situación”, indicó Torres.
Convivencia. Vecinos de la zona señalan que tras el asentamiento, el área se convirtió en zona roja por casos de delincuencia y drogadicción. También denuncian hurtos y vertido de desechos como materia fecal en plena arteria. Cuestionan que se ocupa el sitio sin pagar servicios básicos como agua y energía eléctrica.
A la vez varios pobladores instalados en el predio en cuestión aseguran que en su mayoría son personas trabajadoras que no pueden volver a sus zonas por ser inundables. Dicen no tener la culpa de la conducta de algunos ocupantes. Alcides Benítez, presidente de la comisión formada en el lugar, Divino Niño Jesús, indicó están abiertos al diálogo con los vecinos.
Buscamos que se concrete la construcción de viviendas para no volver al bajo que es zona de inundación.
Alcides Benítez,
presidente de comisión.