22 jun. 2025

Una patada y mucho reclamo gremial

Sindicatos de la Itaipú Binacional repudian la “patada” que propinó el superintendente de Servicios Generales, Adalberto Morínigo, al director administrativo, Gustavo Bogarín y sostienen que la puja por el poder y los conflictos internos en la Directiva afectan al funcionamiento institucional de la Itaipú.

“Tenemos vergüenza ajena por los continuos escándalos protagonizados por personas nombradas en los más altos cargos de la nueva administración paraguaya de Itaipú. Estamos viviendo una pesadilla, la situación ya no da para más”, sostiene un pronunciamiento conjunto de cinco sindicatos de trabajadores de Itaipú (Steibi, Sticcap, Sichap, Sise y Sicae), con relación a la guerra desatada entre altos directivos de la binacional.

“Nos sentimos agraviados ante estas constantes demostraciones de soberbia, prepotencia y autoritarismo de altos gerentes de la entidad, que no benefician en nada a la consideración y al respeto que deben tener hacia nosotros nuestros pares brasileños, asociados a la designación de personas no idóneas para ocupar altos cargos en la entidad, sin respetar la carrera profesional del empleado antiguo de la Itaipú", destaca el comunicado.

Los gremios de Itaipú también se pronuncian “ante la comisión flagrante de hecho de violencia”, refiriéndose a la patada que el superintendente Adalberto Morínigo propinó a su superior jerárquico, Gustavo Bogarín, director administrativo, el día 2 de diciembre, y exigen “la sanción inmediata” al funcionario agresor.

Por otra parte, la guerra desatada entre los altos directivos de Itaipú está afectando al funcionamiento institucional cotidiano de la entidad, sostienen Francisco Mercado y Modesto Rojas, secretario general y secretario general adjunto del Sindicato de Trabajadores de la Empresa Itaipú Binacional (Steibi).

“Esta pelea afecta a la institucionalidad de Itaipú. Los directivos y funcionarios del lado brasileño se ríen de lo que nos pasa en el lado paraguayo, una total falta de seriedad, un verdadero circo, en momentos en que debemos ser serios para seguir negociando la soberanía energética con el Brasil”, refiere Mercado.