10 feb. 2025

Un zaguero exitoso

El defensor fue una de las piezas claves de Libertad para la consagración absoluta en la presente temporada y la buena campaña en la Copa Libertadores.
Sumó el décimo título en su carrera y el cuarto en forma consecutiva.

Pedro Alcides Sarabia se constituye en el futbolista que más títulos ganó entre los que están vigentes en el plano profesional en nuestro fútbol.
Con la reciente consagración con el Gumarelo sumó su décimo título desde que se inició en el profesionalismo. Sus mayores logros los obtuvo con River Plate, de Argentina. Con el equipo millonario ganó cinco campeonatos, incluyendo copas en torneos internacionales. Incluso fue integrante del plantel que llegó al tricampeonato con la institución de Núñez, adonde llegó en 1997 y permaneció hasta mediados del 2002.

SUS INICIOS. El defensor se inició como futbolista en filas de Sport Colombia, club que actualmente se encuentra en la Primera de Ascenso. En 1995 hizo una buena campaña con el conjunto fernandino e inmediatamente Sarabia pasó a Cerro Porteño en 1996. Ese mismo año alcanzó su primer título con el conjunto azulgrana. Posteriormente, a mediados de 1996, fue transferido al Banfield de la Primera División del fútbol argentino. Al año siguiente, River Plate adquirió su pase y entró en la historia grande de uno de los clubes más populares de Sudamérica y acaso del mundo.
Sarabia, igualmente, tuvo una fugaz pasantía por el fútbol mexicano, donde vistió por seis meses la casaca del Jaguares de Chiapas.

LA VUELTA. Tras ocho años retornó al país, y fue en el 2003, para vestir la casaca de Libertad. En su primera incursión nuevamente en nuestro fútbol se consagró campeón absoluto con el Gumarelo. Al año siguiente, en el 2004, volvió a Cerro Porteño y esa misma temporada también alzó la copa del campeonato absoluto con la entidad de Barrio Obrero. Repitió la consagración en el 2005. La más reciente vuelta olímpica la dio con Libertad en este 2006, por lo que es tetracampeón de nuestro fútbol.

DOS MUNDIALES. La regularidad que tuvo Sarabia en los diferentes equipos que jugó lo llevó a formar parte del plantel de la selección nacional en dos mundiales consecutivos: Francia 1998, donde utilizó la casaca número 11, y Corea-Japón, luciendo la