La gala también tuvo un sabor mexicano cuando entregó siete premios a la odisea espacial Gravedad, de Alfonso Cuarón, mientras el drama 12 años de esclavitud ganó como Mejor Película y Mejor Actriz de Reparto para la keniata nacida en México Lupita Nyong’o.
En la noche vencieron también Matthew McConaughey y Jared Leto por Dallas Buyers Club, Cate Blanchett por la cinta de Woody Allen Blue Jasmine, la película italiana La grande bellezza y la animada Frozen.
Si bien Gravedad fue realizada en Londres, eso no impide a los habitantes del sur del Río Grande celebrar el Oscar al Mejor Director para Cuarón, uno de sus cineastas más renombrados, y al de Mejor Fotografía para su compatriota Emmanuel Lubezki.
Además del Oscar para Lupita Nyong’o –que debe su nombre a la Virgen de Guadalupe– 12 años de esclavitud se llevó los trofeos a Mejor Película y Mejor Guion Adaptado.
Su director, Steve McQueen, recordó a las víctimas del calvario en el cual basó su filme, inspirado en las memorias del violinista Solomon Northup: “Todos merecen no solo sobrevivir, sino vivir. Dedico este galardón a todos los que han sufrido esclavitud y los que aún la sufren”.
Asimismo Nyong’o, que des- lumbró con un vestido largo celeste de Prada con un escote hasta el ombligo, rindió tributo a los esclavos.
Cuarón se convirtió en el primer latinoamericano en ganar el Oscar a Mejor Director y Lupita en la primera mexicana en recibir una estatuilla dorada como Mejor Actriz.
La gran perdedora de la noche fue Escándalo americano, película que estaba nominada a 10 galardones y que se quedó con las manos vacías.
CONDUCCIÓN ÁGIL. En su rol de presentadora, DeGeneres estuvo ágil para sacar punta de la torpeza de Lawrence, candidata por Escándalo americano. “Si ganas hoy, creo que deberíamos llevarte el Oscar (al sitio)”, le dijo la presentadora a la actriz.
También se atrevió a preguntar “¿quién tiene hambre?” y sugerir que iba a encargar unas pizzas, se personó allí un repartidor con tres cajas llenas de porciones que se repartieron entre las primeras filas con ayuda de los asistentes que se pasaron platos desechables y servilletas.
Harrison Ford, Jennifer Lawrence, Scorsese, Brad Pitt y Angelina Jolie, Kevin Spacey y otros se hicieron con un pedazo. Las pizzas eran reales, como certificó Lawrence devorando un trozo en directo, y preparadas en un establecimiento de Sunset Bulevar de una cadena local que recibió la mejor promoción que ningún comercio podría tener.
DISCURSOS. Aunque Cate Blanchett hizo el discurso más elegante, Lupita Nyong’o el más emotivo y Jared Leto el más político, el más sorprendente, por religioso, fue el de Matthew McConaughey, quien dedicó su primer Oscar a Dios.
“Dios me ha dado oportunidades que jamás pensé que estuvieran en mi mano. Es un hecho científico que cuando tienes a Dios de tu lado, tienes un amigo”, aseguró tras conseguir la tercera estatuilla para Dallas Buyers Club, la historia de un hombre portador del virus del sida que emprende un negocio ilegal de fármacos para esta enfermedad en los años ochenta. EFE-AFP