Luciano Pertossi, uno de los acusados por el crimen de Fernando Báez, rompió el silencio de casi tres años y manifestó que no estaba en el momento en que golpearon a Fernando, luego ya no volvió a contestar preguntas, tanto del abogado querellante como del fiscal de la causa.
Esto se realizó en la novena de las trece audiencias previstas en el juzgado de Dolores, provincia de Buenos Aires, donde se realiza el juicio que está llegando a su etapa final.
El joven junto a Máximo Thomsen, Enzo Comelli, Matías Benicelli, Blas Cinalli, Ayrton Viollaz, Luciano y Ciro Pertossi, están sentados en el banquillo de los acusados, que habían mantenido hasta ahora un pacto de silencio.
Se estaba emitiendo un video donde mostraban las imágenes de la pelea en la mañana del 18 de enero de 2020, frente a una discoteca en Villa Gesell.
“Yo no estuve ahí”, dijo Luciano, mientras estaban pasando las imágenes en una pantalla gigante y cuatro peritos de la Policía Federal Argentina explicaban el contenido.
Los expertos utilizaron tecnología de reconocimiento facial y por las ropas que tenían puestas en el momento del hecho, se colocó el nombre de cada uno de los jóvenes que aparecen en los videos analizados.
En el material aparecieron los siete acusados que fueron plenamente identificados. Faltaba identificar a uno de remera negra y, por descarte, se suponía que era Luciano y fue el momento en que intervino el joven.
Cuando acabó de hablar, el fiscal Gustavo García, uno de los que llevan el caso, le hizo una repregunta, para que diga dónde se encontraba en ese momento. “No haga preguntas, porque no voy a contestar”, respondió seco el joven.
El abogado de la familia Báez Sosa, Fernando Burlando, también trató de indagar pero fue interrumpido por Pertossi. “No te voy a responder. No me van a sacar nada”, replicó.
CONFIADO. Para Burlando, esta reacción podría ser el final del pacto de silencio o una estrategia de los abogados de los acusados.
La defensa confía en las pruebas presentadas para lograr una condena ejemplar para los sospechosos. “Hoy se cierra un círculo en la reconstrucción de los hechos. Peritos en imagen y reconocimiento facial van a constatar que los acusados fueron quienes mataron a Fernando. Ya no quedan dudas, solo resta el veredicto favorable de los jueces, reclusión perpetua para todos”, señaló a través de las redes sociales.
Movilización en Paraguay
Familiares de los padres de Fernando que viven en la zona de Carapeguá organizan una marcha, para mañana sábado, para pedir a la Justicia argentina condena ejemplar para los ocho acusados en este caso.
La actividad comenzará a las 19:00 con una celebración eucarística en la basílica de la ciudad. Luego, se hará una sentata que continuará con una marcha en silencio por el paseo de las luces de la misma ciudad.
Los familiares esperan una gran convocatoria. Los ex alumnos del colegio San Alfonso, de la ciudad, donde estudió Graciela Sosa, la madre de Fernando, también se unirán a la movilización.
“Cada vez que hablamos con mi tía, ella nos pide que compartamos las publicaciones sobre Fernando y que la apoyemos en su pedido de justicia”, expresó Mariela Sosa, prima del joven fallecido.
En Argentina ya se realizaron varias marchas por las calles pidiendo la máxima pena para los ocho acusados. También, a través de las redes sociales, varias personalidades se manifestaron exigiendo justicia para Fernando.