El gremio explica que la Subsecretaría de Estado de Tributación generalizó erróneamente una ganancia del 30% para calcular en el Régimen Simplificado de Pequeñas Empresas (Resimple) las retenciones a los productores que facturan menos de G. 80 millones al año. Argumenta que el bajo rendimiento de los cultivos y factores climáticos influyen en el impacto que tiene la tasa por cada hectárea cosechada.
“Suspender la aplicación de retenciones por este año hasta diseñar un sistema mejor”, es la salida temporal de las 15 asociaciones que conforman el gremio.
También piden mantener la modalidad de autofacturas para los contribuyentes contemplados en el Resimple.
Para medir el perjuicio a los agricultores, la UGP muestra cómo afecta el descuento en la utilidad bruta, mientras que el impuesto se calcula sobre el monto facturado (ver infografía).
Asimismo advierte que los más golpeados por esta reforma son los más de 100.000 productores con menos de 20 hectáreas que se dedican al cultivo de soja, maíz, sésamo, poroto, yerba, mandioca y hortalizas.
En el caso del maíz estima que el agricultor quedaría con tan solo G. 46.413 por cada hectárea, donde invirtió casi G. 4 millones.
“Si esto se aplica va a desaparecer la agricultura paraguaya. Va a afectar masivamente. Si un productor planta, por lo menos 2.000 plantas de locote cada tres o seis meses; va a terminar plantando 1.000 porque no va a tener retorno. Ahora es difícil para producir, muy caro los insumos agrícolas, no hay créditos suficientes para producir, vamos a trabajar a pérdida”, lamentó por su parte Gregorio Ocampos, horticultor de Caaguazú.