El profesional añadió que el tránsito por la zona será a mediados del segundo semestre. Sin embargo, las obras complementarias continuarán por dos años más. Antona también recordó que siguen pendientes los pagos por la obra por parte del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), pero que las empresas contratistas asumieron el compromiso de continuar a pesar de esta dificultad financiera.
“Todos conocemos la realidad de los pagos, hubo compromiso patrimonial de empresas y de las familias paraguayas para cerrar la obra. En dos meses o dos meses y medio les invitaremos a visitar la obra terminada. La responsabilidad es de las empresas. Proveedores y trabajadores están cobrando. El contrato sí tiene problemas y están trabajando con el MOPC. La banca local da apoyo al proyecto”, señaló.
A 75 metros. Antona también subrayó que están “a menos de 75 metros de la unión de la obra”. Recordó que la construcción inició el 12 de junio de 2020, que más de 1.500 personas trabajaron en ella, con un promedio de 900 personas y que hoy emplea a 650 personas directamente. “Son 7km de proyecto. El puente atirantado es la obra principal. Son 23 tirantes y están montados 17”, detalló el ingeniero.
La inversión requerida para el proyecto es de G. 902 mil millones, el puente atirantado en el plano central mide 603 metros y para la construcción se utilizan 100.000 m3 de hormigón armado, unas 10.700 toneladas de acero y unas 590 unidades de vigas pretensadas.
La futura conexión está con el 90% de avance. Se espera que la culminación sea en 75 días y la circulación de vehículos desde fines de setiembre. La inversión es de G. 902 mil millones.