“Más de 240 millones de personas (más del 70% de la población) están afectadas por alertas meteorológicas”, dijo el Servicio Nacional de Meteorología (NWS).
Las condiciones son muy peligrosas para la circulación, advirtieron las autoridades.
El viernes por la mañana, más de 240 millones de personas estaban afectadas por alertas o llamados a la prudencia, es decir, más del 70% de la población.
Se esperaba que millones de personas salieran a las carreteras y abordaran vuelos para estas vacaciones de Navidad y año nuevo, marcando un retorno a los niveles de movilidad previos a la pandemia.
El condado de Erie, en el estado de Nueva York, se emitió una prohibición para la circulación de automóviles.
“Nos quedamos en casa. No puedo ver al otro lado de la calle”, dijo a la AFP Jennifer Orlando, de la ciudad de Hambourg, afectada por esa prohibición y donde por la mañana la temperatura era de -8 grados.
El choque de un automóvil contra un poste de línea eléctrica la privó de electricidad durante unas cuatro horas, dijo. Más de un millón de estadounidenses estaban sin corriente eléctrica el viernes, sobre todo en Carolina del Norte y del Sur, Connecticut y Texas, según el sitio especializado Poweroutage.us.
“Por favor, tomen esta tormenta con extrema seriedad”, instó el jueves el presidente Joe Biden. “Animo a todos (...) a escuchar las advertencias a nivel local. Es serio”.
El sitio especializado Flightaware contabilizaba más de 3.900 vuelos cancelados. Los aeropuertos más afectados eran los de Seattle (noroeste), Nueva York, Chicago (norte) y Detroit. AFP