19 ene. 2025

Texanos se ingenian para conseguir las pruebas de Covid

Los texanos que buscan hacerse pruebas de Covid encuentran largas colas y farmacias agotadas cuando ese estado del sur estadounidense lidia con una nueva ola del virus inducida por ómicron; la más grande desde que comenzó la pandemia.

“Están agotados desde esta mañana”, respondió un vendedor de la popular farmacia Walgreens, en los alrededores de Houston, al ser interrogado por su suministro de test caseros para el Covid.

“Puede volver en seis días”, dijo el empleado.

La situación se repite en la cadena CVS, así como en otras farmacias. La demanda es tan alta que las personas pueden esperar por horas en grandes instalaciones.

En El Paso, ciudad al oeste de Texas, el canal de televisión local ABC reportó que la espera para ser testeado el jueves era de tres a cinco horas en uno de los “mega-sitios” de la ciudad.

La ola de ómicron está golpeando fuertemente a Texas: El estado registró 54.000 casos positivos el viernes, un balance mucho mayor a los picos diarios de unos 20.000 casos en enero y septiembre del año pasado.

La escasez de pruebas ha sido una de las mayores críticas al manejo de la pandemia por parte del presidente demócrata Joe Biden, cuya administración redobló recientemente esfuerzos.

A finales de diciembre, Biden anunció que el gobierno enviaría 500 millones de pruebas caseras a los habitantes, y el viernes la Casa Blanca informó dio un paso firme para alcanzar esa meta al firmar un primer contrato, valorado en 51,6 millones de dólares, con la compañía Goldbelt Security.

Enfrentados a un número creciente de casos y alta demanda de tests, las autoridades locales texanas decidieron abrir más sitios de pruebas de Covid, como una en San Antonio, donde la tasa de positividad escaló de 2 a 27% en dos semanas, según el alcalde. AFP