Los incidentes se produjeron en el paso fronterizo de Akçakale, en la provincia de Sanliurfa, donde miles de refugiados sirios esperan desde hace días para cruzar a Turquía.
Al mediodía, las autoridades turcas abrieron el cruce, pero sólo pudieron pasar a Turquía cuatro familias antes de que hombres armados, que la emisora citada identifica como miembros del Estado Islámico (EI), impidieran el paso a los demás refugiados.
Un importante grupo de refugiados derribó entonces la valla en un punto cercano pero no pudo cruzar el foso fronterizo y se desplazó hacia un campo de minas, momento en el que las fuerzas de seguridad turcas acudieron para impedirles que atravesaran el lugar.
Al mismo tiempo, grupos de ciudadanos turcos acudieron a la valla y la policía intervino para mantener despejada la zona fronteriza.
Finalmente, sobre las 15.30 hora local (12.30 GMT), los refugiados agolpados en el lado sirio pudieron empezar a cruzar de forma ordenada.
En las últimas dos semanas, unos 15.000 refugiados sirios han cruzado a Turquía por el paso de Akçakale, según estima NTV.
El viernes pasado, el Gobierno cifró en 13.500 el número de refugiados que llegaron a Turquía a través de ese paso desde comienzo de este mes.