No habían pasado más de diez minutos de este precoz gol, cuando Osvaldo Martínez anotó luego de más de una década en el fútbol paraguayo, en una jornada que preparaba un momento todavía más histórico. Pero eso vino recién al final.
Antes Martínez volvió a marcar, pero esta vez con una de esas soberbias definiciones a que nos tuvo acostumbrados en sus comienzos y en sus mejores momentos en el fútbol mexicano: parándola en el aire con el taco, ubicando de emboquillada la pelota sobre el arquero.
El final del primer tiempo deparó otro gol, esta vez de Nildo Viera. Todo estuvo definido en apenas 45 minutos. El quinto, de Luis Leal, cayó como algo inevitable. 12 solo pudo sorprender con una cosa: el amonestador y ocasional regreso a las canchas de Nelson Bernal, a los 49 años, el más longevo jugador de la historia del fútbol paraguayo.
Osvaldo Martínez
Autor de un doblete (uno de antología) y una cesión, hizo todo bien en una tarde en la que también destacó Cazal.