El boom de exportación de carne a China sufrió un revés y los países de la región como Brasil, Argentina y Uruguay, que el año pasado enviaban sus productos masivamente a ese destino, ahora vuelven a inundar los mercados en los que Paraguay se había posicionado. Esta situación ya se observaba antes de la aparición del coronavirus con medidas internas a las importaciones, pero la crisis sanitaria agrava el impacto.
Recién a mediano plazo se podrán cuantificar los efectos negativos que sufre el país por la mayor oferta de carne en los mercados tradicionales.
“Ellos cuando se volcaron masivamente a China y ahora con esta crisis están volviendo otra vez a los viejos mercados, donde nosotros nos habíamos posicionado mientras ellos estaban en China. En Chile por ejemplo, siempre hay una amenaza de que entre alguien a ofrecer menos precios y que molesta”, advirtió el gerente general de la Cámara Paraguaya de Carnes (CPC), Daniel Burt.
Esta situación ya repercutió en los importadores de Israel, que hizo contratos en febrero con una baja de entre USD 350 y USD 450 por tonelada, quedando entre USD 5.250 a USD 5.450, mientras que Argentina se mantiene en USD 8.000, aunque de acuerdo a la publicación de Faxcarne, la tendencia es que el país vecino termine también bajando sus precios.
Israel es el tercer comprador, antes están Rusia y en primer lugar Chile, donde los frigoríficos paraguayos se mantuvieron el año pasado como segundo proveedor, aunque cerraron con una mayor participación, al acaparar el 34,7% del mercado trasandino.
Es el principal destino de la carne paraguaya, los últimos reportes del Banco Central del Paraguay indican que en enero pasado compró 7.500 toneladas por USD 36,5 millones, lo que representa un incremento de 18,9% y 30,9%, respectivamente.
La situación preocupa a los industriales, pues temen una inundación de exportaciones a ese mercado, ocasionando que los precios se desplomen.
EFECTO CHINA
Como los demás países miembros del Mercado Común del Sur tienen las puertas abiertas para enviar carne a China, aprovecharon para enviar un mayor volumen en el 2019 ante la ausencia de Estados Unidos por el conflicto comercial que mantenía con el gigante asiático. Mientras tanto Paraguay se rebuscó por otros destinos que ahora nuevamente están recibiendo productos de los exportadores de la región.
“China empezó como un boom donde estaban pagando precios altísimos, donde estaban comprando muchísimo, después eso reventó y empezaron a renegociar precios, empezaron a rechazar contenedores, eso es lo que escuchamos nosotros de nuestros vecinos. Después se sumó el coronavirus, lo que agravó la situación”, agregó Burt.
Las infecciones por el coronavirus ocasionaron más de 1.300 muertes y la paralización de algunas negociaciones comerciales. Directamente afecta a Paraguay en las importaciones de productos de origen asiático, pero indirectamente también repercute en las exportaciones pecuarias.
PRECIOS DEL GANADO
El sector industrial y el ganadero mantienen la disputa de precios por el novillo. Por segunda semana consecutiva los frigoríficos pagaron por cada kilogramo al gancho USD 2,80, que significa una baja de más de 5% con relación a los precios de hace un mes. Incluso Argentina, que estaba teniendo los peores números se encuentran ahora por encima de los bovinos del territorio guaraní, mientras que Brasil continúa a la baja con USD 2,60 y Uruguay se mantiene en USD 3,26 por kilogramo, de acuerdo a los datos de la Comisión de Carne de la Asociación Rural del Paraguay.
La peor caída está afectando a Brasil, que hasta los últimos meses del 2019 tenían precios tan tentativos que los ganaderos paraguayos empezaron a hacer trámites para vender a los frigoríficos del país vecino animales vivos para la faena. La autorización no prosperó hasta el momento y aunque los precios ahora ya no sean los más convenientes, la Asociación Paraguaya de Productores y Exportadores de Carne insiste en lograr los permisos para eventualmente exportar ganado en pie a cualquier mercado, entre los cuales Turquía está en la mira.
FRIGORÍFICOS SUSPENDIDOS
Rusia sigue siendo el segundo comprador de carne paraguaya y si bien continúan los envíos, siete frigoríficos siguen teniendo restricciones por la presencia de residuos de antibióticos y en un caso, hormonas de crecimiento.
Frigorífico Mercantil Única de Servicios SA (Mussa) Frigochorti, Guaraní, Neuland, Frigochaco y FrigoNorte son las empresas con esta medida.
En el último caso, la industria está paralizada y los empleados no cobraron su sueldo de enero. Luego de una manifestación, la empresa se comprometió a pagar sus compromisos el lunes y aseguró que no habrá despidos.
