Sin embargo, los antecedentes del sector político señalan que en más de una ocasión, actuaron de forma dudosa y en contra de los intereses nacionales.
ACTA SECRETA. Uno de los casos más conocidos fue la defensa al presidente de la República, Mario Abdo Benítez, y al vicepresidente Hugo Velázquez, luego de ser acusados de traición a la patria en el caso de la firma del acta secreta de Itaipú. Honor Colorado salvó a los mandatarios del juicio político y de la destitución.
TERRORISMO. Otro caso reciente es la acusación del Gobierno de los Estados Unidos sobre los vínculos de Horacio Cartes y otros actores políticos colorados con el grupo terrorista Hezbollah.
“Hezbollah ha realizado regularmente eventos privados en Paraguay, donde los políticos hacían acuerdos por favores, vendían contratos estatales y discutían los esfuerzos de la aplicación de la ley a cambio de sobornos”, indica la acusación.
TIERRAS MALHABIDAS. El tercer elemento es el manejo histórico que tuvo el Partido Colorado con la tierra en el país. La Comisión de Verdad y Justicia (CVJ) reveló mediante documentaciones la adjudicación fraudulenta de casi ocho millones de hectáreas desde 1954 hasta 2003, es decir, principalmente dentro de la dictadura stronista. Estos territorios públicos que debían ser entregados a connacionales, principalmente a campesinos, se quedaron en manos de personas no beneficiarias, entre ellas, extranjeros, y son conocidas como tierras malhabidas.
El Partido Colorado, y principalmente el cartismo, tiene políticas contrarias a la devolución de estas tierras.
SOBERANÍA ENERGÉTICA. Otro caso muy cuestionado fue el acuerdo Cartes-Macri sobre Yacyretá, considerado como una entrega de la soberanía energética, que implica, entre otros, la aceptación de una deuda espuria de USD 2.000 millones para Paraguay, como así también la no aceptación del derecho del país de disponer de su energía para la venta a terceros países, y que implica una pérdida de USD 500 millones por año.
Marito, siendo senador e incluso durante su campaña para la presidencia, había prometido derogar el acuerdo, firmado a espaldas del Congreso, pero esto nunca se dio.
DESVÍO. Los candidatos colorados intentaron convencer al electorado nacional con discursos en favor de la vida y la familia durante toda la campaña.
“Lo que está en juego no es poca cosa, queremos cuidar el modelo de país que tenemos. Tenemos fuerzas que están enfrente, en el proceso electoral e inclusive fuera del país que están tratando de alterar el orden constitucional de nuestro país”, manifestó Arnoldo Wiens, durante un discurso en marzo pasado, en un acto público.
Yo quiero defender la vida, la familia y nuestra soberanía nacional en el Senado de la Nación.
Lizarella Valiente,
candidata al Senado.