El viceministro de Tributación, Óscar Orué, informó que ninguna institución de Argentina y de la Fiscalía paraguaya le solicitó informes sobre el estado impositivo de la firma. “No hay inconsistencia ni datos relevantes para iniciar una investigación a Vicentin Paraguay. En caso que exista alguna denuncia se iniciará el proceso como en todos los casos”, respondió ante la consulta sobre el caso.
Los acreedores de Vicentin SAIC, de Argentina, creen que la empresa simuló un default y que en realidad tiene activos que fueron desviados a cuentas offshore a través de las compañías asociadas, entre ellas la filial paraguaya.
La deuda asciende a más de USD 1.300 millones a entidades bancarias del vecino país y del extranjero, así como a proveedores.
Operación. En medio de la intervención de la empresa argentina y la intención del Gobierno de expropiarla, surgieron hipótesis de que la soja del vecino país se hace pasar como de origen paraguayo para evadir altos impuestos. Sin embargo, desde el sector exportador ven imposible esa maniobra, tanto por los controles aduaneros como por los costos que representa.
