Los técnicos taiwaneses debían visitar la industria porcina en marzo del 2020, pero debido a la pandemia del Covid-19 postergaron el operativo. Sin embargo, para el sector público y el privado actualmente ya no hay excusas, atendiendo a que las vacunas dan seguridad a los viajeros y que como antecedente se destaca la misión estadounidense a todas las plantas de exportación de carne bovina en noviembre del año pasado.
“Se hacen muy de los desentendidos. Solo se les pide oportunidad de crecimiento y desarrollo para el país en un área donde hay mucho potencial”, lamentó el titular del Senacsa, José Carlos Martin.
Argumentó que en la última reunión, los representantes de Taiwán cortaron la reunión cuando se iba a tratar la organización de la visita de los técnicos, lo que provocó una nota de atención de parte del Senacsa dirigida al embajador en Paraguay, José Chih-Cheng Han.
La preocupación se agudizó teniendo en cuenta la crítica situación del sector porcino.
El director de Upisa, César Ros, explicó que esto se debe a que China prácticamente cerró su importación y que Rusia abrió la compra de solo 100.000 toneladas. Esto generó una sobreoferta a nivel mundial, donde Brasil coloca su producción a precios tan bajos que deja fuera del mercado a Paraguay.
El empresario dijo que con una negociación del 10% de las 80.000 toneladas de carne porcina que compra anualmente Taiwán, se aliviarán las pérdidas del sector. “Nosotros no necesitamos un cheque de Taiwán, nosotros necesitamos que nos abran el mercado”, se quejó.