Ameliano entró más aceitado al juego y acercó un par de peligro concreto al arco local a través de sus dos puntas, Oviedo y Arce, pero allí emergió la figura del arquero Escobar, quien se vistió de bombero. En el otro arco, un blooper de Cristóforo, que sacó en la espalda de Villagra para que la pelota fuera directo a gol, fue anulado por el juez Ojeda que entendió falta del delantero. Empezó movido el partido vespertino, como pocos veces tenemos en estos tiempos y cuyo horario tiene su delicia. Al menos nos traslada al hermoso pasado cuando los partidos empezaban a las 3 de la tarde.
Pero volvamos al partido que se volvió equilibrado y declinando en su intensidad. La batucada guaireña ponía mayor emoción. Hasta que Gaitán se robó una pelota y salió al golope a pisar área rival; envió un perfecto centro para que Oviedo concrete con remate fuerte para acallar los tambores. Al menos por un instante. Porque antes que se vaya el primer tiempo, Cristóforo se equivocó y tumbó a Villagra. Penal claro. Diego Armando fusiló para que todo el Parque lo festeje. Y a vuelta de vestuario continuó la celebración gua’i cuando Víctor Barrios embocó en un córner (con expectativa del VAR). De ahí en más todo fue muy guerreado, con la V azulada buscando el empate y acariciándolo, pero la Albiceleste aguantó y sigue de festejo.
Guaireña sigue celebrando. Reaccionó y venció a Ameliano.
David Mendoza
Un defensor polifuncional que esta vez jugó de central. Rápido y seguro en sus movimientos, orientó a su equipo.