AFP - EFE
JERUSALEN
El Ejército israelí amplió ayer sus operaciones terrestres en la Franja de Gaza, gobernada por el movimiento islamista palestino Hamás, que dijo estar preparado para enfrentar una invasión. En efecto, anoche confirmaron que se registraron “intensos combates” con las tropas israelíes.
La comunidad internacional manifestó su preocupación por la situación humanitaria en el enclave, bombardeado y asediado por Israel en respuesta al letal ataque lanzado desde allí por Hamás el 7 de octubre.
La Asamblea General de la ONU aprobó una resolución que pide una “tregua humanitaria inmediata”.
Con 120 votos a favor, 14 en contra y 45 abstenciones, la Asamblea general aprobó el texto propuesto por Jordania en nombre del grupo árabe, en el que no se nombra ni a Hamás ni a Israel. Rechazó una enmienda de Canadá que pedía condenar expresamente a Hamás por los atentados del 7 de octubre que provocaron la muerte de más de 1.400 israelíes, la mayoría civiles.
Infamia. Israel, en contrapartida, consideró la señalada resolución de la ONU como una “infamia”.
El ministro de Exteriores israelí, Eli Cohen, expresó su “rotundo” rechazo al “despreciable llamado de las Naciones Unidas a un alto el fuego” en Gaza, tras la resolución aprobada en la Asamblea General en ese sentido a iniciativa de los países árabes.
“Rechazo rotundamente el despreciable llamado de la ONU a un alto el fuego. Israel tiene la intención de actuar para eliminar a Hamás como el mundo actuó contra los nazis y el ISIS (Estado Islámico)”, afirmó el jefe de la diplomacia israelí en un mensaje en la red social X (antes Twitter).
Hamás, que había llamado a la comunidad internacional a movilizarse “para que cesen los crímenes y las masacres” israelíes, celebró la resolución.
Estados Unidos se manifestó a favor de una “pausa humanitaria” para dejar entrar ayuda a Gaza.
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, advirtió que “sin un cambio fundamental de la situación, la población de Gaza sufrirá una avalancha de sufrimiento humano sin precedentes”.
El grupo islamista afirmó que “cerca de 50” rehenes murieron por los bombardeos israelíes.
Israel impuso además un asedio prácticamente total de ese territorio de 362 km2 y más de 2,3 millones de habitantes.
El Ejército israelí indicó que aumentó los bombardeos “de manera muy significativa” y anunció que “ampliará sus operaciones terrestres esta noche”, tras dos noches seguidas de incursiones de tanques.
Los bombardeos se concentraron en particular en la Ciudad de Gaza, al norte de la Franja, de acuerdo mostraron videos de AFP.
Hamás señaló pocas horas después enfrentamientos en dos sectores de la Franja.
“Nos enfrentamos a incursiones terrestres israelíes en Beit Hanun (norte) y al Bureij (centro). Se están librando intensos combates”, indicaron.
Hamás se dijo “preparado” para enfrentar una invasión.
“Si (el primer ministro israelí, Benjamin) Netanyahu decide entrar en Gaza esta noche (por ayer), la resistencia está preparada”, declaró en Telegram un dirigente de Hamás, Ezzat al Risheq. “La tierra de Gaza se tragará los despojos de los soldados israelíes”, añadió.