Una de las proyectistas, Lilian Samaniego, explicó que la intención es que ya no sea obligatorio que figuren como divorciadas o viudas.
El proyecto también lleva la firma de su colega y correligionaria Mirta Gusinky, y la sugerencia fue la aprobación con modificaciones. Ahora el texto pasa a la Cámara Baja.
“Si se aprueba y se promulga, la opción en caso de divorciarse o de quedar viuda, es usar su nombre de soltera, de forma automática”, explicó Samaniego a la prensa.
“Va a ser opcional. Si quiere seguir viuda o divorciada va a poner, sino ya no lo va a hacer porque va a tener una ley que le respalda”, dijo.
Destacó que el beneficio para las mujeres es que tendrán la libertad de escoger, y remarcó que ser divorciada se convirtió en un estigma.
Paraguayo Cubas planteó algunas modificaciones. Samaniego explicó que la preocupación de Cubas tenía que ver con posibles declaraciones falsas sobre el estado civil.
“Él presentó una modificación para que esa persona se haga cargo de lo que está declarando con relación a las uniones de hecho”, refirió.