La paciente con diagnóstico de absceso cerebral (pus en el cerebro) fue sometida a la intervención como alternativa a la craneotomía, que implicaba un alto riesgo para su vida y la de su bebé; además podía ponerla en vulnerabilidad ante la circulación del virus SARS-CoV-2.
“Lo innovador de esta técnica quirúrgica es que aparte de ser una cirugía mínimamente invasiva, si no contábamos con este método, se hubiera tenido que abordar con una craneotomía, que implica abrir el cráneo; y el paciente automáticamente requiere de una cama en terapia intensiva, exponiéndose a las comorbilidades por la intubación, aumentando el riesgo de infecciones pulmonares y mantenerse en completo estado de sedación. En el caso de esta paciente se vuelve complejo, por su embarazo y los efectos que puede producir la anestesia general”, explicó el Dr. Ítalo Flecha.
Desde el 2020, la Unidad de Estereotáxica se emplea para tomas de biopsias, lesiones cerebrales profundas, drenajes y colocación de dispositivos, gracias a su sistema de coordenadas tridimensional que ayuda a acceder a estructuras cerebrales profundas.
La intervención que duró aproximadamente una hora, fue realizada por el Dr. Darío Díaz, jefe de la Unidad de Estereotáxica; acompañado de los médicos residentes en neurocirugía Ana Riquelme, María José Cristaldo, Ítalo Flecha, Kevin Arce y Luis González. La enfermera Lic. Lorena Genes; los anestesiólogos, el Dr. Raúl Santacruz y la Dra. Estelvina Sanabria. Además de la colaboración de los profesionales del área de imágenes en tomografía del nosocomio.