Los participantes resolvieron conformar una mesa de trabajo permanente a fin de llevar adelante la firma de un convenio entre las partes para que la Municipalidad de Presidente Franco pueda tener la facultad de coadyuvar en los controles de estas empresas.
“La ley no les permite a las administraciones comunales controlar estos servicios, por lo que los responsables siguen haciendo lo que quieren con los usuarios”, señalaron durante la reunión realizada en la sede de la Junta Municipal de Presidente Franco. “Recibimos más de 200 denuncias solamente en los meses de enero y febrero, la mayoría por los cortes arbitrarios que generan las aguateras privadas y municipales. Las aguateras piden entre 2 a 3 millones de guaraníes para conectar el servicio de agua y a los que no tienen dinero les dicen que no tienen agua nomás”, afirmó José Ozuna, jefe de la oficina de Defensa al Consumidor y Usuario de la Municipalidad local.
En los casos de las aguateras municipales son las que están conformadas por comisiones vecinales, donde la Comuna pone el tanque de agua y la comisión administra. Sin embargo, se dieron casos en que, al segundo o tercer año, miembros de una sola familia acaparan la directiva y comienzan a manejar el servicio municipal como privado, de acuerdo con la versión de Ozuna.
Por otro lado, para realizar las instalaciones se rompen capas asfálticas, se realizan cobros excesivos y se hace figurar el doble de usuarios para poder facturar más. “La Erssan quita la autonomía a las municipalidades con la ley bajo la cual opera, pero tiene solo 2 funcionarios para los 22 distritos del Alto Paraná. Figura solo en papeles, porque no tiene condiciones de controlar la calidad del agua, ni los servicios de las aguateras. La ciudadanía no tiene quién defienda sus derechos”, agregó el responsable de Defensa al Consumidor y Usuario.
En la reunión los funcionarios del ente estatal presentaron el proyecto de dotar de agua potable a las ciudades metropolitanas, que es una solución a largo plazo y costo de varios millones de dólares americanos, que no representa la solución urgente que necesitan los pobladores de Presidente Franco, acorde a los datos. En la ciudad operan seis aguateras privadas, de las cuales solo una está al día con sus impuestos y entre 16 a 18 aguateras municipales, conforme a los registros de Defensa al Consumidor. Como medida de urgencia, se proyecta una ordenanza municipal para restringir la conformación de las comisiones vecinales por parte de funcionarios, para evitar el tráfico de influencias y posteriores problemas con los usuarios, informaron en la Comuna.
En uno de los casos la Municipalidad de Presidente Franco invirtió 40 millones de guaraníes en la instalación de un tanque de agua con mil metros de manguera de alta presión para la comunidad del barrio Villa Concejal, en una propiedad privada. En la actualidad, el terreno fue amurallado y el propietario administra la distribución, mientras que los vecinos piden que el tanque sea cambiado de lugar para tener acceso al servicio.