REUTERS, EFE y AFP
TRÍPOLI, LIBIA
Representantes del poder civil y militar de Libia, controlados por comités populares tras el levantamiento del 17 de febrero, mostraron su confianza en que el líder libio Muamar el Gadafi abandone pronto el poder. Fathi Tarbul, miembro del gobierno provisional de Bangasi, la segunda ciudad del país, aseguró en una rueda de prensa que “Gadafi tiene bajo control un 15%" del país.
Fuerzas de seguridad abandonaron el barrio de clase trabajadora de Tajoura tras 5 días de protestas contra el Gobierno, según dijeron residentes a corresponsales extranjeros. Los mismos que no quisieron ser identificados por temor a represalias, dijeron que soldados dispararon contra manifestantes que marchaban desde Tajoura, matando a 5 personas, cifra que no pudo ser confirmada en forma independiente.
DESAFÍO AL GOBIERNO. El funeral de una de las víctimas la mañana del sábado se convirtió en otra muestra de desafío al Gobierno. “Nos manifestaremos otra vez y otra vez, hoy, mañana, pasado mañana hasta que cambien”, dijo un hombre quien se dio a conocer como Ali, de 25 años. Lo que pasó en Tajoura contradijo con las declaraciones del hijo de Gaddafi, Saif al-Islam Gaddafi, quien dijo a la prensa el viernes que la paz estaba regresando a Libia. “Si escuchan fuegos artificiales no los confundan con tiroteos”, agregó Gadafi, de 38 años, sonriendo.
GUERRA CIVIL. Ayer, sosteniendo que los rebeldes eran pocos y aislados, advirtió que los disturbios amenazaban con una guerra civil. “Lo que está pasando en el país ha abierto la puerta a todas las opciones y ahora las señales de guerra civil y de injerencia extranjera han comenzado”, dijo en una entrevista con Al Arabiya TV.
La televisión estatal libia mostró otra vez una multitud cantando su lealtad a Gaddafi en la Plaza Verde de Trípoli el sábado. Pero periodistas estimaron su número en sólo unos 200. Gran parte del este del país productor de petróleo, incluyendo a la segunda mayor ciudad, Bengasi, está en manos de rebeldes. Diplomáticos afirman que 2.000 o más personas han muerto en todo el país. Desde Misrata, ciudad a 200 kilómetros de Trípoli, residentes y grupos de exiliados dijeron por teléfono que una ofensiva de fuerzas leales a Gadafi fue repelida violentamente por los rebeldes. “Hubo violentos enfrentamientos anoche y en las primeras horas de la mañana cerca del aeropuerto”, dijo un residente, Mohammed. “Un estado de alerta extrema prevalece en la ciudad”, agregó.
El presidente Hugo Chávez pidió la paz en Libia y expresó su apoyo al Gobierno de Muamar Gadafi, pero alegó que no comparte las decisiones del líder libio.
OBAMA PIDE LA SALIDA
El líder libio Muamar Gadafi debería dejar el cargo, dijo ayer sábado el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, en una conversación telefónica con la canciller alemana, Ángela Merkel. “El presidente sostuvo que cuando los medios de un líder para mantenerse en el poder son sólo el uso de la violencia contra su propio pueblo, pierde la legitimidad para gobernar y debe hacer lo correcto para su país dejándolo ahora”, dijo la Casa Blanca en un comunicado tras la conversación. La Casa Blanca informó que Obama y Merkel reafirmaron su respaldo a la demanda del pueblo libio por los derechos universales y convinieron en que el Gobierno de Gadafi “debe rendir cuentas”.
Vecindarios pobres de Trípoli desafiaban abiertamente ayer sábado a Muamar Gadafi, quien veía cada vez más debilitado su control sobre el país tras 41 años de Gobierno, en medio de una revuelta nacional.