El ingeniero agrónomo Víctor Benítez, asesor de la bancada del FG, explicó que para poder presentar el proyecto de ley, primeramente se debe realizar la consulta a los indígenas Avá Guaraní Paranaenses de la comunidad Sauce, a través del Instituto Paraguayo del Indígena (Indi).
“El otro requisito, que cumple plenamente, es que haya documentos antropológicos que digan que es un territorio ancestral, y tanto Jorge Servín como el padre Bartomeu Meliá, han publicado y demostrado suficientemente que ese era el territorio ancestral de los Avá Guaraní Paranaenses de Puerto Sauce”, explicó Benítez, agregando que el Indi debe participar en esto y a favor de los indígenas, no de la Itaipú.
Detalló que en los TIC (territorios indígenas de conservación) la gobernanza la ejercen los indígenas, y para ello se presenta al Mades el plan de vida, que es como un plan de manejo que presentan los que administran áreas protegidas.
“Itaipú debería de acompañar todo esto porque puede ser una agenda positiva, lo poco, un lunarcito de buena voluntad que demuestren, ya que inundaron todo el territorio ancestral de los Avá Paranaenses. Es una deuda histórica, socioambiental y cultural que tiene Itaipú, y tiene que cumplir, porque las directivas para que eso ocurra hoy día están plenamente en vigencia, a través del Convenio con la OIT, la Declaración Universal de los DDHH, la Constitución Nacional, el Convenio de Diversidad Biológica, además de la resolución del Mades”, dijo.
MIEDO. Sin embargo, el temor que tienen los indígenas es por las amenazas de los narcotraficantes y contrabandistas que utilizan las áreas protegidas de Itaipú para montar puertos clandestinos para el tráfico ilícito entre Paraguay y Brasil.
La única forma de paliar esta situación es un compromiso y acompañamiento serio de los entes de seguridad del Estado responsables de combatir al crimen organizado que domina la zona.
Benítez recordó que, como publicó ÚH, en la propia reserva Limoy, existe actualmente un puerto que funciona prácticamente como un puerto clandestino, ya que, según reconoció la propia Administración Nacional de Navegación y Puertos (ANNP), la misma funciona sin ningún tipo de control ni presencia de oficina del Estado, y mueve unos ochenta camiones por día.
La investigación de ÚH descubrió que la poligonal envolvente de Itaipú, franja de bosques de protección del embalse de 1.524 kilómetros que va de Hernandarias hasta Salto del Guairá, es invadida por agroganaderos y traficantes, así como también hay 24 cesiones y 26 solicitudes.
los narcosojales de itaipú: negociado y destierro binacional (CXV)
