“Expreso con todas las fuerzas, el más apremiante llamamiento a que cese todo conflicto, a retomar seriamente el proceso de paz para que finalicen las agresiones y la gente pueda volver a vivir de manera digna. Solo con la paz, la estabilidad y la justicia podrá haber desarrollo y reintegración social. Pero no podemos esperar más”, dijo tras escuchar los testimonios de algunos niños que viven en los campos para desplazados.
Como recordó el papa en el Freedom Hall de Yuba, donde escuchó sus testimonios, “un gran número de niños nacidos en estos años solo han conocido la realidad de los campos para desplazados, olvidando el ambiente del hogar, perdiendo el vínculo con la propia tierra de origen, con las raíces, con las tradiciones. No puede haber futuro en los campos para desplazados”.
“Se necesita que todos los jóvenes tengan la posibilidad de ir a la escuela y también el espacio para jugar al fútbol”, dijo el papa Francisco a Johnson, uno de los chicos que presentó su testimonio. EFE