19 ago. 2025

Padre y padrastros son detenidos por abuso sexual

Tres hombres fueron detenidos ayer por abuso sexual en menores, dos de ellos a sus hijastras, uno a su propia hija. Estos casos se registraron en Presidente Franco, Minga Guazú y Minga Porã, Departamento de Alto Paraná.

El primer hecho ocurrió en el barrio María Auxiliadora de Presidente Franco, donde un hombre fue capturado cuando estaba a punto de abandonar su domicilio, al percatarse de que lo habrían denunciado por supuesto abuso sexual de su hijastra.

El caso fue denunciado por una vecina. El detenido habría manoseado a una de sus seis hijastras, todas menores, pero la sospecha policial es que todas habrían sido víctimas de vejámenes. La fiscal Viviana Sánchez confirmó que se comprobó que el hombre manoseó a una de las menores, pero no descartó que hayan más víctimas en la familia.

La fiscal sostuvo que también investigará a la madre, por la probabilidad de que la misma sea cómplice de su actual pareja.

La víctima fue entregada a la madre nuevamente, por disposición de la representante del Ministerio Público.

El segundo hecho, fue en la colonia Limoy del distrito de Minga Porã. Allí fue aprehendido otro hombre sindicado de violar a su hijastra, de 11 años. El supuesto autor fue capturado por una comitiva policial fiscal, tras denuncia radicada por la abuela.

La víctima fue sometida a inspección médica forense, a cargo del médico Javier Brítez, quién confirmó el abuso.

El tercer caso fue en el centro urbano del distrito de Minga Guazú, donde se produjo la detención de un hombre sindicado de haber intentado violar a su hija de 13 años. El hecho habría ocurrido en la vivienda familiar.

El supuesto autor fue sorprendido por un familiar que lo denunció ante la policía. La fiscal Carolina Gadea ordenó su detención por tentativa de abuso sexual en niños. (EM)


El entorno familiar
Según datos del Ministerio de la Niñez y la Adolescencia, el 80 por ciento de los abusos sexuales en niños, niñas y adolescentes se produce en el entorno familiar y la gran mayoría de los victimarios en estos casos son los propios padres y padrastros, seguidos en menor medida por abuelos y primos.