Los jóvenes exigen a los parlamentarios no postergar el proyecto y, además, aprobarlo sin modificaciones.
Declararon enemigos de la educación pública al diputado Sebastián García y al ministro de Hacienda, Benigno López, casi los únicos políticos que se mostraron abiertamente en contra de la propuesta.
Los alumnos de la Facultad de Ciencias Sociales de la UNA (Facso) amenazaron a los diputados que “se atrevan a modificar el proyecto con escraches públicos”.
La normativa tiene media sanción de la Cámara de Senadores, que estableció que se utilice el 7% de los recursos del Fonacide para cubrir el costo de los aranceles, que actualmente es financiado en su totalidad por los alumnos.
Otros parlamentarios de diferentes bancadas de la Cámara Baja sí apoyaron públicamente el proyecto y prometieron dar su ok sin cambios.